La madrileña Adriana Cerezo, plata olímpica en Tokio, medallista mundial y doble campeona de Europa, dio por cerrado su año competitivo y afirmó que afronta 2026 con “hambre” por competir y “muy bien físicamente”.
La deportista de Alcalá de Henares, de 22 años, admitió que el año 2025 no ha sido a nivel de resultados “tan bueno" como le habría gustado, pero destacó que sí ha sido positivo en cuanto a “claridad de objetivos, claridad de trabajo y construcción de pilares”.
“Creo que en 2026 se empezará a reflejar”, dijo la madrileña, que despedirá el año participando en el tradicional Winter Training Camp junto a campeones olímpicos y mundiales.
“Venimos de una tralla muy fuerte de campeonatos fuera y pensamos que era un momento de descanso”, dijo la española, que aseguró sentirse “súper fresca” para afrontar el próximo año con la máxima energía.
En cuanto a los objetivos para 2026, Cerezo aseguró que le interesa “todo”. “No sólo el Europeo, también los torneos del Grand Prix y comenzar a puntuar para los Juegos”, recordó la madrileña, que dio prioridad a encontrarse "en el tapiz” sobre los resultados puntuales.
“Me encuentro sana, motivada y feliz entrenando. Y eso, antes o después, tiene que explotar en competición, da igual la que sea”, argumentó.
Adriana Cerezo negó que esté pagando en los últimos años su brillante entrada en el taekwondo mundial, cuando irrumpió en la escena internacional con el título continental, la plata olímpica y el bronce en el Campeonato del Mundo.
“Son etapas. Hace poco escuché una reflexión sobre Michael Jordan, que ganó seis anillos de la NBA en no sé cuántos años que estuvo en la competición. ¿Qué pasa? ¿Fracasó en los años en los que no ganó? Yo creo que no”, argumentó la campeona española.
“Al final, los piñazos que te has pegado forman parte de tu presente y te ayudan para el futuro”, reflexionó Cerezo, una de las madrinas elegidas por la Real Federación Española de Taekwondo (RFET) para inaugurar el Combat Sport Center de La Nucía, un espacio para la formación, tecnificación y desarrollo de jóvenes talentos.
“Me parece una locura la cantidad de metros que hay, diáfanos y acondicionados para entrenar. Creo que es lo que nos faltaba y lo que echábamos en falta”, señaló Cerezo.
“Este tipo de instalaciones son una parte muy importante del rendimiento deportivo. Y ahora no tenemos excusa para ponernos manos a la obra”, añadió la campeona española, que confesó que ver el crecimiento exponencial del taekwondo en los últimos años es lo que "más ilusión" le hace.
“Este tipo de apuestas significa que estamos haciendo las cosas bien y que seguimos creciendo y sembrando para el futuro”, sentenció.