Esta semana el Pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobaba eliminar todas las placas o monumentos de la capital que rindieran tributo a la Guerra Civil y a la Dictadura. El gobierno de Manuela Carmena ha comenzado suprimiendo, sin consenso con el resto de formaciones, las primeras 30 calles. Entre ellas, algunas no exentas de polémica. Es la calle Francisco Iglesias en Puente de Vallecas. El ayuntamiento de Madrid quiere eliminarla del callejero. Dice que homenajea a un aviador que luchó en el bando franquista pero en realidad está dedicada a un industrial. Por si fuera poco el militar al que se refiere el consistorio fue un pionero de la aviación, amigo de destacados republicanos y, según los historiadores, nunca participó en los crimenes que se le atribuyen.