Las calles de Madrid tienen unas "nuevas" e "indeseables" inquilinas. Se llaman "procesionarias" y son unas ORUGAS que pueden resultar tóxicas para los adultos y mortales para las mascotas. Por eso es importante mantenerse alejados de ellas. Es un clásico en bósques y parques en primavera y suelen crear colonias al abrigo de los pinos. En Madrid, se han visto en algunos puntos de la capital. En el distrito de Tetuán, en la calle Orense, en el barrio del pilar.. o en el Parque de Ana Tutor. Allí está Ana Castro. Ana: suponemos que inquietud entre los vecinos.