Seguro que alguna vez han sufrido una espera interminable en la barra de un bar antes de ser atendido. Un estudio acaba de desvelar la fórmula para que el camarero nos sirva antes nuestra consumición. Nada de chistar, de ponerse nervioso o de llamar la atención impacientes. Lo mejor, mantenerse tranquilo frente a la barra, mirar al camarero y esperar a ser atendido