El año pasado las casas construídas en España apenas llegaron a las 40.000. Esto explica que el consumo de cemento descendiera un 34% siendo la mayor caída de su historia. La crisis del sector de la construcción ha supuesto que en estos momentos la producción de cemento en nuestro país sea la misma que en los años 60. La diferencia es que entonces se terminaban en España 142.000 viviendas, tres veces más que en la actualidad