Renfe y Adif dudan de las secuelas de algunos de los heridos del accidente Alvia
- Un total de 15 testigos declaran en la segunda sesión del juicio del accidente ferroviario
Este miércoles se celebra la segunda jornada del juicio civil por el accidente del Alvia en Santiago de Compostela hace 10 años. Declaran 15 testigos. Entre ellos, heridos en el accidente, sus familiares y un pariente de un fallecido en la tragedia de Angrois. La jueza tiene que decidir cuál será la cuantía de las indemnizaciones.
Las aseguradoras de Renfe y Adif han puesto en duda en esta segunda sesión de la fase de responsabilidad civil del juicio por el accidente del tren Alvia que las secuelas de algunos de los heridos sean consecuencia de los golpes sufridos en el descarrilamiento.
Ha sido el caso de un viajero que perdió la visión tras el siniestro ferroviario y que por ese motivo tuvo que dejar su profesión. "Amaba mi profesión. Tener que cortar con eso ha sido muy traumático, cambiar mi vida totalmente", ha declarado este testigo.
Las aseguradoras de Renfe y Adif han puesto en duda que las secuelas de algunos de los heridos sean consecuencia del descarrilamiento
En el turno de la aseguradora de Renfe, QBE, su abogada le ha preguntado por su nivel de visión antes del accidente. "Era suficiente. Tenía una salud visual delicada. Tenía que cuidarla y corregir mi visión con gafas y he tenido problemas de salud ocular, pero ninguno que me haya hecho dejar mi actividad profesional y necesitar ayuda en mi vida diaria", ha respondido este hombre.
El juicio del Alvia constata la 'herida abierta' de las víctimas de Angrois
En este sentido, y ante las cuestiones de la letrada de esta aseguradora, el testigo ha admitido que "veía menos que otras personas pero podía hacer", según ha remarcado, su vida y su trabajo. "La misma víspera del accidente yo estaba trabajando. Tenía compromisos antes y después del accidente. Si quiere hacer ver que el accidente no tuvo que ver... no sé entonces cómo ha habido un antes y un después", ha subrayado el hombre.
El 24 de julio de 2013 murieron 80 personas y 140 resultaron heridas a pocos kilómetros de la estación de Santiago. En la acción penal, la jueza tendrá que determinar si los acusados, el maquinista y el ex jefe de seguridad de Adif, son responsables de otros tantos delitos de homicidio y lesiones por imprudencia profesional grave.
