Madrid desde el aire: Madrid, la ciudad entre ciudades

Madrid no se entiende sin las otras ciudades que la rodean. El Arco del Triunfo de Moncloa, el Templo de Debod, el edificio España y la Torre de Madrid, en la Plaza de España, son algunos de los emblemas que flanquean las entradas de la capital. Gran Vía y Alcalá vertebran el centro de la ciudad, y algunos de sus edificios y fachadas no dejan indiferente a nadie, como el edificio de Telefónica, el Círculo de Bellas Artes, el Banco de España o el Palacio de Correos, actual ayuntamiento.

Al suroeste, encontramos momentos de recreo en el estadio Vicente Calderón, la Casa de Campo y su lago, el Parque de Atracciones y el Zoo. Volamos Manzanares abajo, años antes de la remodelación de su entorno, hacia el Planetario, para volver a adentrarnos en la ciudad a través de paseo de Delicias y Atocha. Comienza entonces el llamado "Triángulo del arte", con el Museo Reina Sofía, el Thyssen y El Prado. Estamos en la parte más monumental de la capital, con el Congreso de los Diputados, Neptuno y la Puerta de Alcalá, la silueta más conocida de Madrid en todo el mundo, que sirve además de entrada al popular parque de El Retiro.

Nos dirigimos a la zona este, donde sobresale Torre España, la antena de telecomunicaciones construida con motivo del Mundial 82, y la M30 nos conduce hacia la plaza de toros de Las Ventas y el cementerio de la Almudena, que desde lo alto es realmente sobrecogedor.

De nuevo en el centro encontramos la Plaza de Colón, la Biblioteca Nacional, con sus más de 3 millones de volúmenes, y tomamos altura hacia el Madrid más alto, dominado por los rascacielos del eje de la Castellana. Hasta la construcción de las Cuatro Torres, los techos de Madrid fueron las Torres Kio, el Windsor -antes de su incendio-, la torre del BBVA y sobre todo Torre Picasso.

Mientras, San Sebastián de los Reyes, lugar de los encierros más populosos de la Comunidad, y Alcobendas y su Museo de la Ciencia se erigen como los principales núcleos de población del norte metropolitano. No muy lejos, el Soto de Viñuelas, con su castillo de casi 400 años, y el circuito del Jarama.