Los aficionados argentinos denuncian faltas graves de seguridad al permitir que ambas aficiones se mezclaran y, sobre todo, discriminación por parte de la Policía brasileña en el Brasil-Argentina.
Detenido junto a otros 17 aficionados retenidos en Maracaná. La mayoría heridos que, además de la dureza policial sufrieron sus burlas y para quedar libres tuvieron que pagar.
La mayoría de los detenidos están en libertad salvo una aficionada que se encuentra en prisión preventina acusada de proferir insultos racistas.
Graves incidentes en las gradas en el Brasil-Argentina
Una de las testigos, declaró ante la jueza brasileña haber oído a la hincha argentina referirse a la víctima como pedazo de mono. Un crimen por injurias que en Brasil está castigado con penas de entre dos y cinco años de prisión.
Este es el último episodio de violencia entre brasileños y argentinos en un noviembre negro. A principios de mes, aficionados de Boca y Fluminense protagonizaron escenas para olvidar en las calles de Río.
