Los océanos pueden albergar hasta 50 billones microplásticos, según Greenpeace

Los océanos podrían albergar entre 5 y 50 billones de microplásticos, según estimaciones de la ONG Greenpace, que ha lanzado una campaña 'Mejor sin plásticos', con la que pedirá al Gobierno español una batería de medidas para elminar estos residuos de los mares.

Junto con esta iniciativa, la organización ha presentado un estudio sobre el impacto de los plásticos en el pescado y el marisco. El responsable de Campañas de Greenpeace, Julio Barea, ha recalcado que la producción de plásticos no ha dejado de aumentar "en los últimos 50 años" ya que cada años se vierten al mar 8 millones de toneladas de basura, en su mayoría, plástico.

En este sentido, ha puntualizado que la producción mundial de este producto superará los 500 millones de toneladas anuales, lo que supondría un 900% en relación a los valores de 1980.

Además, ha destacado la capacidad de dispersión de los plásticos y ha recordado que hay cinco "islas de basura" formadas por microplásticos repartidas en el Pacífico, en el Atlántico y en el Indico. La responsabilidad, según ha apuntado, es de la sociedad. "Simples medidas como prohibir las bolsas de un solo uso o volver a vender como depósitos los envases de bebidas tendrían efectos inmediatos", ha explicado.

IMPACTO EN LAS ESPECIES

La organización ecologista ha analizado el impacto que los microplásticos --piezas de hasta 5 milímetros de longitud-- tienen sobre los ecosistemas marinos y asegura que se ha documentado los efectos que las piezas de plástico tienen sobre peces y crustáceos y cómo, su ingesta implica alteraciones en la reproducción de las especies y en su comportamiento.

Los microplásticos se generan de la degradación de plásticos mayores o incluso de los ya existentes en cosméticos o dentífricos. "Los daños de los microplásticos, a diferencia de los más grandes, son potencialmente mayores porque son más accesibles a más especies, incluso para el fitoplancton", ha asegurado la responsable de océanos de Greenpeace, Elvira Jiménez.

De este modo, ha explicado que los peces más pequeños confunden estos materiales con huevas y los ingieren. Después, los microplásticos no se expulsan, sino que permanecen en el interior del pez. En esta línea, ha destacado que también afecta a su cadena trófica y que, también se han podido detectar microplásticos en sus depredadores.

También ha explicado la dificultad en degradarse que tienen estos materiales que, según afirma, ronda entre los seis meses y cientos de años. En cuanto al impacto en la salud humana, Jiménez ha pedido que se investigue porque son portadores de toxinas.

La campaña lanzada por Greenpeace solicita al Ejectivo español: eliminar el abandono de envases y garantizar su correcto reciclado mediante la implementación de sistemas de retorno de envases; prohibir el uso de microesferas de plástico; establecer las medidas necesarias para implantar la Directiva Europea sobre las bolsas de plástico de un solo uso para noviembre de 2016; y fomentar medidas basadas en la economía circular, que apuesten la reutilización de la materia prima y nuevos materiales con menor impacto ambiental.

En este sentido, Barea ha pedido a la sociedad que evite el uso de cucharas y platos de plástico, productos con sobreembalajes, botellas de agua, bricks o juguetes de plástico.

Con esta campaña, que coincide con el último fin de semana del verano (momento en el que más residuos se generan en playas, ríos y embalses), Greenpeace llevará a cabo diversas actividades a lo largo de toda la geografía española. Así, a partir del día 27 de agosto hasta el 10 de septiembre, realizará un total de 20 recogidas y caracterizaciones de residuos abandonados en playas, ríos y embalses de todo el Estado.

La primera de ellas tendrá lugar en Valencia el 27 de agosto, el resto se desarrollarán los días 3 y 10 de septiembre, siendo la última de ellas en Mallorca. La campaña también tendrá presencia en las redes sociales donde se animará a los usuarios a que participen enviando sus fotografías y testimonios de la presencia de plásticos en su entorno y que firmen para pedir un océano libre de plásticos.