Seis mossos heridos leves en la segunda noche de disturbios en el barrio Gràcia

  • Vecinos de Gràcia muestran su preocupación por los altercados del Banco Expropiado
  • La Generalitat apoya a los Mossos: es inadmisible la violencia de una "minoría"

Seis agentes de los Mossos d'Esquadra resultaron heridos leves en la segunda noche de disturbios en el barrio de Gràcia tras el desalojo del conocido como 'Banc Expropiat'. Así lo ha informado la policía catalana, que no ha realizado ninguna detención la noche de este martes, en la que se han registrado menos incidentes.

Los Mossos han contabilizado 12 contenedores volcados, uno de ellos quemados, pintadas en varios comercios y daños en la puerta de la antigua sucursal bancaria, que había sido tapiada. Los manifestantes, que protestaron por segundo día consecutivo, comenzaron a retirarse de la zona poco antes de la medianoche mientras agentes de los Mossos d'Esquadra y varios furgones custodiaban la sucursal bancaria.

La segunda concentración empezó de forma pacífica alrededor de las 20.30 horas en la plaza del Diamant y siguió con una marcha improvisada por la calle Torrent de l'Olla y Travessera de Gràcia, hasta llegar al edificio.

INADMISIBLE VIOLENCIA DE UNA MINORÍA

El conseller de Interior, Jordi Jané, ha apoyado hoy a los Mossos d'Esquadra en su "difícil labor" a la hora de evitar que una "minoría" provoque de forma "inadmisible" graves alborotos y ponga en riesgo la "convivencia pacífica", como cree que ha ocurrido en el barrio de Gràcia de Barcelona.

Jané se ha referido a los disturbios ocurridos en las dos últimas noches en el barrio de Gràcia de Barcelona tras el desalojo del "banco expropiado", y se ha mostrado convencido de que los responsables policiales tienen como una "exigencia prioritaria" que la actuación de las fuerzas de seguridad se rija por los principios de congruencia, oportunidad y proporcionalidad.

Jané, que ha asegurado que Barcelona es una ciudad "abierta y convivencial", ha resaltado que en una sociedad democrática y plural se tiene que respetar el derecho a la manifestación y a la libertad de expresión, aunque no se esté de acuerdo con los argumentos que esgriman las personas que protestan. "Pero lo que en ningún caso se puede admitir -ha enfatizado- es que una minoría de los que se manifiestan acaben convirtiendo una protesta inicialmente pacífica en un acto violento".

"Estos días en Barcelona una minoría de los que se manifestaba, algunos de ellos encapuchados, llevando material inflamable, y con un actitud violenta, han provocado graves alborotos y han puesto en una situación de riesgo objetivo a muchas personas y bienes", ha advertido.

Para Jané, la sociedad pide "mayoritariamente" a la administración que actúe "ante aquellas situaciones que quieren poner en riesgo la convivencia pacífica". "Lo que quiere la ciudadanía, las personas, es que estas situaciones no vayan a más. Lo que siempre queremos es no causar daños mayores", ha afirmado.

El conseller ha insistido en que considera inadmisible manifestarse encapuchado, con material inflamable y pirotécnico, arrojando piedras, botellas y palos contra la línea policial. "Provocar estos graves alborotos, con incendios en calles estrechas del barrio de Gràcia, que pueden llegar a afectar viviendas y bienes, no puede ser nunca admisible. Quemar vehículos y contenedores o volcar en plena vía pública coches y motos no puede ser admisible", ha insistido el conseller.

GOBERNAR CON EXTREMISTAS

El candidato del PP por Barcelona y ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado este miércoles que incidentes como los ocurridos en Gràcia tras el desalojo del conocido como 'Banc Expropiat' están vinculados al hecho de "gobernar apoyado en extremistas", en alusión a la CUP. "Que un gobierno como el de la Generalitat, con competencias tan importantes, dependa de un partido como la CUP es insostenible", ha destacado en rueda de prensa en la sede barcelonesa del PP junto al portavoz del partido en el Congreso, Rafael Hernando.

Ha dudado de que la CUP pueda garantizar la gobernabilidad y al mismo tiempo ser un partido "antisistema que ejerce la violencia como se ha visto" en Gràcia.

También ha criticado que el Ayuntamiento de Barcelona "esté apoyando a los que protagonizan estas acciones en vez de preservar el bien común", algo insólito y que debe hacer reflexionar a los ciudadanos sobre la necesidad de que haya gobiernos serios y responsables.

"De un partido como la CUP no puede depender la gobernabilidad del Ayuntamiento", ha respondido al ser preguntado por la presencia del concejal 'cupaire' Josep Garganté en las protestas contra el desalojo.

También ha criticado que los socialistas hayan apostado por sumarse al gobierno municipal de BComú: "El PSOE se incorpora así a un proyecto radical y extremista".

"Gobernar apoyado en extremistas y en radicales lleva a situaciones como" las que se vivieron en Gràcia, algo que no conviene ni a los barceloneses ni al conjunto de catalanes, ha añadido.

Fernández Díaz cree que no es casual que los altercados en Gràcia coincidieran con la presentación en el Parlament del proyecto de Presupuestos para 2016, a la que la CUP no acudió en señal de rechazo a las cargas policiales. "Voy a estar siempre del lado de la policía, en este caso de los Mossos", cuya misión es garantizar la seguridad ciudadana, el cumplimiento de la ley y evitar que hechos tan graves como los ocurridos en Gràcia queden impunes.