Pintarse los labios de rojo fue el recurso en la crisis del 29. En la que estamos atravesando también pero ahora además se hacen más arreglos en la cara.
En estos tiempos, deben pensar muchos hay que aumentar la autoestima y la confianza en uno mismo, ante una situación laboral que exije lo mejor de nosotros mismos. Por eso crece la demanda para mejorar el aspecto del rostro.
Si hay que buscar trabajo o ganarse un cliente es mejor hacerlo con buen aspecto. Es lo que considera Simón Dray, médico estético de la Clínica Francesa Dray para quien lo más importante en la vida laboral es la cara. Una buena cara con luz y con simpatía asegura es muy importante para buscar trabajo porque una liposucción no se ve.
Por eso las grandes operaciones de cirugía estética como las liposucciones o los aumentos de pecho, que suelen ir acompañados de un fuerte desembolso económico se han reducido en un 40%, en muchas ocasiones porque la falta de créditos bancarios que antes se concedían para este tipo de intervenciones.
in embargo, según un estudio del Instituto Tapia de Barcelona el lifting corto localizado se pide un 20% más en mujeres desde el comienzo de la crisis económica y ha aumentado en un 15% en el caso de los hombres la blefaroplastia que es la extracción de la grasa y la piel sobrante de los párpados. Son datos que no dejan de confirmar al refrán: A mal tiempo… buena cara.
