La leche sigue siendo la mejor fuente dietética de calcio

  • La Fundación Española de Nutrición alerta sobre los riesgos del bajo consumo de leche de los españoles
  • Ocho de cada 10 españoles no consumen el calcio que necesitan por el denostado concepto que están teniendo los lácteos y sus derivados

La leche sigue siendo la mejor fuente dietética de calcio. Lo dice un estudio realizado por la Fundación Española de Nutrición y alerta sobre los riesgos del bajo consumo de leche de los españoles. Un hecho que relacionan con el denostado concepto que en los últimos tiempos están teniendo los lácteos y sus derivados.

Ocho de cada 10 españoles no consumen el calcio que necesitan, según dice la Federación Española de Nutrición. El consumo de leche va, por cierto, intimamente ligada al calcio, que, si no lo obtenemos de forma natural por la exposición a los rayos solares, lo podemos encontrar en otros alimentos como los pescados grasos.

La Fundación Iberoamericana de Nutrición y la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética insisten: No cubrimos los requerimientos mínimos y no deberíamos seguir así.

LA LECHE, LA MEJOR FUENTE DE CALCIO

La leche es la mejor fuente dietética de calcio y sólo con un vaso se ingiere la misma cantidad de este compuesto que con 7-8 raciones de cereales o 6-7 de verduras o legumbres, al tiempo que su elevada biodisponibilidad facilita su absorción por parte del organismo.

Así se desprende de una revisión de la Fundación Española de Nutrición (FEN) y la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT) sobre la evidencia científica disponible acerca de las funciones biológicas del calcio y sus principales fuentes dietéticas, presentado ante el Día Mundial de la Leche que se celebrará el jueves 1 de junio.

Aunque algunos alimentos de origen vegetal como los cereales, las frutas, los frutos secos o las legumbres pueden suponer una fuente adicional de calcio dietético, su biodisponibilidad (capacidad de absorción) es muy reducida y "no han de contemplarse como fuente dietética de elección" ya que "no pueden satisfacer las necesidades nutricionales de calcio y vitamina D en las distintas etapas de la vida", según ha explicado Gregorio Varela, presidente de la FEN.

EL CALCIO OBTENIDO DE LA LECHE SE ASOCIA A UNA MAYOR DENSIDAD ÓSEA

La ingesta adecuada de calcio, obtenida fundamentalmente a través del consumo de leche y de productos lácteos, conjuntamente con un estatus adecuado de vitamina D, se asocia a una mayor densidad ósea, a un menor riesgo de fracturas en la población adulta y a una menor perdida de masa ósea en las mujeres postmenopáusicas, entre otros beneficios.

Por ello, tal y como estos expertos han subrayado, es más importante que nunca que la población tome conciencia acerca del papel "fundamental" del calcio y de la vitamina D para la salud, y el rol indiscutible que juega la leche como fuente dietética para ambos micronutrientes.

UNA DIETA EXENTA DE LECHE ES UN ERROR Y CREA PROBLEMAS

Existe la idea de que una dieta exenta de leche y lácteos no supone un problema a la hora de alcanzar las ingestas recomendadas de calcio y vitamina D, y esto es un error de acuerdo a nuestro modelo alimentario, porque la exclusión de los lácteos impide alcanzar las ingestas de referencia para todos los grupos de edad", ha reconocido Varela.

En cambio, las bebidas vegetales no son equiparables a la leche como fuente dietética de calcio, a pesar de que el consumo de leche de España se está reduciendo empujado en parte por el auge de estas otras bebidas.

De hecho, un estudio de Kantar realizado en 2016 reveló que el 81 por ciento de los consumidores que redujo su consumo de leche optó por una bebida vegetal como alternativa, al considerarla una opción más saludable.

"Las bebidas vegetales no son sustitutivas de la leche desde un punto de vista nutricional, ni tampoco equiparables a ella en cuanto a sus aportes de calcio a la dieta, por lo que de ningún modo han de contemplarse como alternativa dietética para alcanzar las ingestas recomendadas de calcio diarias", ha añadido Ángel Gil, presidente de FINUT.

La razón es que el calcio no esta presente en la composición de muchas de estas bebidas, y cuando se añade (como sucede en la bebida de soja), al no estar asociado a proteínas lácteas, su biodisponibilidad es mucho menor que el calcio presente de manera natural en la leche. Además, la gran mayoría de estas bebidas no contienen vitamina D.