La Fiscalía pide el ingreso inmediato en prisión de Raquel Gago por riesgo de fuga

  • Las acusaciones pública y particulares, en contra de dejar en libertad provisional a la policía

El fiscal del juicio por el crimen de Isabel Carrasco, Emilio Fernández, ha reclamado el ingreso inmediato en prisión de Raquel Gago al entender que existe riesgo de fuga tras ser considerada culpable de asesinato, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas.

Raquel Gago, de 42 años, agente de la Policía Local de León, es la única de la tres acusadas por el crimen de la dirigente del PP -todas ellas consideradas culpables de los mismos delitos- que permanece en libertad provisional.

Las dos acusaciones particulares -que ejercen la hija y la pareja sentimental de la víctima- y la popular -a cargo del PP- se han sumado a los argumentos de la Fiscalía. Por su parte, el letrado Fermín Guerrero, que representa a Gago, ha pedido al tribunal que se mantenga la libertad provisional de su patrocinada hasta que se resuelvan los recursos que ha anunciado que presentará a la sentencia, que se conocerá en los próximos días.

ACUSACIONES PÚBLICA Y PARTICULARES

El Ministerio Fiscal y las acusaciones particulares han expresado hoy su rechazo a la puesta en libertad provisional de la agente de la Policía Municipal Raquel Gago, considerada por el jurado, al igual que Montserrat González y su hija Triana Martínez, autora del asesinato de la que fuera presidenta de la Diputación y del PP leonés, Isabel Carrasco, registrado el 12 de mayo de 2014.

Así se han posicionado todas las acusaciones durante la vista celebrada hoy en la Audiencia de Valladolid para dilucidar si Gago debe ser puesta o no en libertad provisional antes de conocerse la sentencia que podría llevarla a prisión durante los próximos quince años.

En este sentido, los acusadores entienden que la agente debe permanecer presa por "riesgo de fuga" ante la gravedad de la pena solicitada para ella por delito de asesinato en concurso con otro de atentado y tenencia ilícita de armas, algo que, por contra, su defensor, Fermín Guerrero, entiende que no plantea el más mínimo peligro pues, como así ha recordado, su patrocinada ya se mantuvo en libertad provisional antes de la celebración del juicio durante cerca de un año.