La irrupción de internet ha revolucionado en los últimos años el sector periodístico hasta el punto de ser motivo de preocupación y a la vez de oportunidad, según se ha puesto de manifiesto esta tarde en Valladolid, dentro de la asamblea de la Federación de Asociaciones de Periodistas (FAPE).
La presidenta de esta entidad, Elsa González, ha resaltado la "difícil situación" del sector, básicamente por la reestructuración obligada por las nuevas tecnologías que, por otra parte, supone un "tiempo de oportunidades enormes" para contrarrestar lo que ha definido como "el peor momento" de la profesión.
"Las tecnologías están de nuestro lado. Representan toda una oportunidad y pueden dar la batalla tanto para mejorar el empleo como la ética periodística", ha reflexionado ante los informadores antes de participar en una mesa redonda sobre la situación del periodismo.
En este punto ha considerado la necesidad de ayudas por parte de la administración para reflotar el sector, orientadas al empleo y nunca enfocadas a la reducción de puestos de trabajo, ha advertido.
"No se pueden conceder ayudas para despedir a trabajadores, sino para reconvertir", ha precisado.
Otro informador, Guillermo Altares, jefe de la sección de Internacional del diario El País, ha apelado a la calidad como punto de partida para salir de una crisis que, en buena medida, ha provocado unas tecnologías "a las que hay que adaptarse" porque internet "es la prioridad en este momento".
"Si se mantiene la calidad, sin duda llegarán la publicidad y los recursos económicos", ha insistido.
Por su parte, Aurelio Martín, uno de los vicepresidentes de la FAPE, se ha referido a los "cambios trascendentales" que ha sufrido y aún padece la información, su estructura y su modelo productivo, debido a la "transformación constante y rápida" de los soportes a través de internet.
La fuerza de ese proceso "se ha llevado por delante tradicionales modelos de negocio" lo que, unido a la "escasa capacidad de reacción" por parte de los empresarios periodísticos, ha provocado una "constante sangría de puestos de trabajo" y un "alarmante crecimiento del paro" en el sector periodístico, ha dicho a Efe.
"Nada volverá a ser igual a cómo lo hemos conocido y vivido", ha advertido Martín tanto a los periodistas como a quienes se preparan en las universidades, "que quizá deberían de retocar sus planes de estudio", ha insinuado este experto en periodismo digital y 2.0.
Frente a todo ello, ha considerado necesario una adaptación de los periodistas al nuevo sistema pero con "dos premisas fundamentales": evitar la pérdida de derechos fundamentales como ciudadanos, y que "la precariedad que domina las redacciones no termine por disolver las dosis de calidad que merece la información".
Otro recurso, a juicio de Martín, es la búsqueda de nuevas fórmulas de trabajo basadas en el autoempleo que se van a sustanciar, "ya nadie lo discute, fuera de las redacciones que conocimos, hace poco tiempo relativamente, llenas de máquinas de escribir".
