España, entre los países con menos confianza en las personas, en las instituciones y en el futuro

  • El estudio muestra una amplia vigencia de la institución familiar, con un alto nivel de confianza e importancia

España es uno de los países europeos que menos confianza muestra hacia las personas, las instituciones y el futuro, en gran parte debido a la crisis y a la falta de empleo, según el estudio 'Values and Worldviews Vida Personal: estilos de vida, valores y creencias' de la Fundación BBVA. Este estudio ha contado con una muestra de 1.500 entrevistas a mayores de 18 años entre diez países de la UE. Los países incluidos en el estudio han sido Dinamarca, Suecia, Países Bajos, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, República Checa, Polonia y España.

El análisis incluye un apartado de 'nivel de satisfacción' de los ciudadanos, entre los que se aborda la confianza en la gente. En el caso de España, se sitúa en la penúltima posición entre los países encuestados, únicamente superados por Francia, con una media de 4,7 puntos en una escala de valores de diez.

En este caso, el grupo de jóvenes con estudios universitarios es el que presenta el nivel de confianza más alto, junto con los ciudadanos menos afectados por la crisis. No obstante, tanto en España como en el resto de la UE, el radio de cercanía es un factor clave y los encuestados muestran un alto grado de confianza tanto en los familiares como en los amigos.

Respecto a las instituciones, España es uno de los países más representativos de los que se distancian con la esfera pública. En concreto, muestra un bajo nivel de confianza en la clase política (tanto en grupo como en instituciones), así como incluye una valoración negativa del funcionamiento de la democracia.

PESIMISMO EN CUANTO AL FUTURO

Todo ello lleva en España a un nivel de pesimismo en cuanto al futuro superior al del resto de la media europea, tal y como recoge el estudio. Así, los ciudadanos españoles se muestran en su mayoría de acuerdo ante la afirmación que señala que 'el pasado fue mejor que el presente', en contraposición a otros países más positivos como los escandinavos, que también confían en el futuro.

En cualquier caso, el estudio muestra una "amplia vigencia" de la institución familiar tanto en Europa como en España, puesto que al alto nivel de confianza de los ciudadanos se suma la importancia que le otorgan los encuestados, en el mayor escalón por encima de la salud o los ingresos en el hogar, entre otros.

La encuesta también aborda la aceptación de un conjunto de prácticas objeto de controversia moral como la eutanasia, el aborto o el matrimonio homosexual. En este apartado, España se sitúa en la zona media-alta de aceptación, junto con Francia y Reino Unido, y alejada de los otros dos países que se declaran más religiosos, Italia y Polonia.

ESPAÑA Y LA UE, DIVIDIDOS ANTE EL ABORTO

En el caso del aborto, España se muestra "dividida", con un 44% calificando esta práctica de "aceptable" y un 39% mostrando su rechazo (un 16% la considera "intermedia"). Estos porcentajes son similares prácticamente a los de la UE.

Por el contrario, respecto al matrimonio entre las personas del mismo sexo, los ciudadanos españoles se muestran a la cabeza entre los más tolerantes, con un 56,1% de aceptación, sólo superados por Países Bajos, Dinamarca y Suecia. Predomina un amplio rechazo en Polonia e Italia y las opiniones están más divididas en el resto.

Pese a que España se encuentra en la mayoría de los casos por encima de la media europea, prevalece la desaprobación de recurrir a madres de alquiler o la adopción y concepción de un niño por parte de una pareja homosexual. Además, la percepción de inaceptabilidad de la infidelidad es muy alta en todos los países.

ASISTENCIA A RITOS RELIGIOSOS

En el apartado de la religión, en España siete de cada diez personas reconocen pertenecer a una de ellas y los ciudadanos españoles están por encima de la media europea a la hora de asistir a ritos religiosos o bautizar a un hijo. No obstante, a la hora de elegir casarse por ceremonia religiosa, los españoles sí están por debajo de la citada media. Además, a diferencia de Italia y Polonia, la opinión mayoritaria de los encuestados españoles considera a la Biblia como "un libro antiguo de fábulas y leyendas", frente a la consideración de un libro "inspirado en la palabra de Dios" o que sea "realmente la palabra de Dios".

Por último, la encuesta recoge otros aspectos como que España está entre los países que menos lee el periódico tanto en papel como en Internet (tres de cada diez admiten no hacerlo 'casi nunca') y también es el que cuenta con más ciudadanos que admiten haber iniciado una dieta para adelgazar en los últimos seis meses (un 16,9% de los encuestados).