José Bretón, que está siendo juzgado por el asesinato de sus dos hijos el 8 de octubre de 2011, le dijo a su mujer Ruth Ortiz, momentos antes de ser detenido, que tenía que llevarle a los niños "tarde más o tarde menos".
Durante la penúltima jornada del juicio ha tenido lugar la exposición de las pruebas documentales, entre las que se incluyen el visionado de las imágenes de la llegada de Bretón a la Ciudad de Los Niños, recinto adjunto al parque donde dice que perdió a Ruth y José, y las escuchas de las conversaciones telefónicas del acusado antes de ser detenido el 17 de octubre de 2011.
También se ha podido escuchar la llamada que Bretón realizó al 112 para denunciar la desaparición de los niños, mientras que no se han reproducido las conversaciones de sus familiares ya que se acogieron a su derecho de no declarar.
LLAMADA A SU MUJER
Entre las conversaciones más destacadas se encuentra la que Bretón hizo a Ruth Ortiz sobre las 22.50 horas, momentos antes de ser detenido, para comentarle que el policía que le había sido asignado le está preguntando por su relación matrimonial y el trato que tenía con sus hijos. En un momento dado, Ruth Ortiz le pregunta a Bretón cuándo le traerá a sus hijos, ya que la felicidad depende de ello.
Bretón, con voz apagada, le contesta que le da mucha "fuerza" pensar en sus hijos y que se los tiene que llevar para que estén con su madre "tarde más o tarde menos".
Un día antes, el 16 de octubre, sobre las 18.17 horas, Bretón llama a sus exmujer para decirle que le parece muy bonita la carta que ésta ha leído en una manifestación en Huelva pidiendo el regreso de los niños.
El acusado le asegura a Ruth Ortiz que él ha sido el que ha perdido a los niños y que él debe ser el que se los tenga que devolver, conversación que dura menos de un minuto.
VIEJA AMIGA
Sin embargo, al instante, Bretón llama a una antigua amiga a la que le recuerda los besos que no se dieron hace 14 años y trata de quedar con ella para recuperar la amistad que habían perdido. La conversación se prolonga durante más de treinta minutos en la que en ningún momento se habla de los niños y se centra en la vida personal de ambos, mientras que Bretón insiste en quedar pronto con ella.
El jurado también ha tenido oportunidad de escuchar la llamada que Bretón hizo al 112 el día que perdió a sus hijos, en la que, con voz angustiada, informa de dónde y cómo desaparecieron los pequeños Ruth y José. El acusado describe cómo iban vestidos los niños en el momento que los perdió y desde el 112 le piden que se tranquilice y que dan aviso de inmediato a los servicios de emergencias.
AMIGO DE UN GUARDIA CIVIL
Las escuchas han finalizado con las conversaciones entre el 12 y 14 de octubre de Bretón y un amigo suyo, que es miembro de la Guardia Civil, que trata de ayudarle y asesorarle sobre el proceso. Bretón le asegura que se encuentra acosado por los medios de comunicación y que, aunque no está detenido, la policía le hace muchas preguntas y no cree su versión.
Su amigo le dice que se busque un abogado y que tratará de enterarse de lo que está ocurriendo ya que no entiende que le pregunten tanto por la finca de "Las Quemadillas" y lo lleven allí sin detenerlo y sin contar con un abogado.
Tras finalizar las prácticas de las pruebas, las partes se han ratificado en sus escritos provisionales y han elevado a definitivas sus conclusiones. La fiscal ha matizado su escrito respecto a que Bretón no engañó a su psiquiatra para que le recetara los antidepresivos, sino que fue el médico el que se los recetó voluntariamente.
Además, también ha concluido que en la hoguera que Bretón hizo en "Las Quemadillas" se utilizaron 250 kilos de leña y 80 litros de combustible, mientras que ha mantenido la petición de 40 años de prisión para el acusado al que considera autor de dos delitos de asesinato y otro de simulación de delito.
Por su lado, la acusación particular ha solicitado para Bretón la misma pena que pide el fiscal, mientras que la defensa ha pedido la total absolución del acusado.
La vista se reanudará el próximo lunes con los informes finales de las partes, y el martes se conformará el objeto del veredicto que trasladarán al jurado, que debería tomar una decisión en un máximo de 48 horas que podrían ser prorrogables otras 48 horas más.
