Uno de cada diez niños españoles es infeliz a pesar de las comodidades

  • Entre las principales causas de la infelicidad infantil destaca no pasar suficiente tiempo con la familia o no tener suficiente tiempo para jugar

Uno de cada diez niños españoles es infeliz a pesar de las comodidades que tienen, según un estudio de Imaginarium. Tendemos a identificar infancia con felicidad, pero no siempre es así. Uno de cada 10 niños no es feliz. Niños que lo tienen todo, pero se sienten tristes. Los expertos explican las razones de este preocupante fenómeno.

El 9,6 por ciento de los padres cree que sus hijos no son felices a pesar de todas las comodidades y facilidades que están a su disposición, según el II Estudio sobre Felicidad e Infancia de Imaginarium, que ha generado un total de 4.713 respuestas y cuenta con un 95 por ciento de margen de confianza.

El porcentaje de infelicidad de los niños españoles se va incrementando con la edad, ya que, según este informe, un 16,56 por ciento de los niños entre cinco y ocho años es infeliz, dato que asciende al 22,66 por ciento en el caso de los adolescentes.

Entre las principales causas de la infelicidad infantil, destaca no pasar suficiente tiempo con la familia o no tener suficiente tiempo para jugar, entre las principales causas de infelicidad.

"Se trata de una evolución normal en los niños, ya que según van creciendo los desafíos a los que se enfrentan también son mayores, sobre todo cuando la parte de socializar con iguales se convierte en algo fundamental en sus vidas", ha asegurado la psicóloga clínica y miembro del Comité de Expertos de Imaginarium Ana Saro.

El estudio refleja que el 85,74 por ciento de los encuestados asegura que el futuro de la felicidad de sus hijos es una de sus principales preocupaciones. Para Saro, que los padres quieran la felicidad para sus hijos es una "necesidad normal", al igual que quieran que "tengan éxito en la vida, que no enfermen o que coman adecuadamente".

Así, para el 53,43 por ciento de los padres lo "más importante" es que los más pequeños se sientan queridos y valorados en el entorno familiar y escolar. Otro aspecto clave para los padres encuestados es el tiempo que puedan compartir con sus hijos y cómo sea aprovechado (37,03%) y la importancia del juego real como medio para explorar y conocer el mundo (6,20%).

LOS JUEGOS DE PANTALLAS NO APORTAN FELICIDAD

Por el contrario, el estudio señala que solo un 0,59 por ciento de los padres identifica los juegos con pantallas como una de las claves para la felicidad de sus hijos, a pesar del uso generalizado que se hace de estos dispositivos, dato que se ve reforzado por el "escaso" 15 por ciento que las identifica como el tipo de juego que hace más feliz a sus hijos.

Las mayores preocupaciones de los padres hacen referencia a no poder pasar el suficiente tiempo juntos (28,28%), no tener tiempo para jugar (20,79%) y ser castigados por un mal comportamiento (18,57%). Igualmente, destaca la importancia de no tener tiempo para jugar a juegos reales en las edades comprendidas entre los cinco y ocho años 33.45 por ciento.

Lejos de estas causas, aparecen otras como no poder disfrutar de planes fuera de casa (8,63%) y no jugar con pantallas tanto como quisieran (2,78%).

"UN NIÑO ES FELIZ CUANDO JUEGA"

"Sabemos que un niño es feliz cuando juega, siente curiosidad y se interesa por las cosas y las personas. En este sentido, felicidad y juego van de la mano", explica la miembro del Comité de Expertos de Imaginarium Imma Martín.

Según este estudio, tan solo un 17,72 por ciento de los niños es plenamente consciente de lo feliz que es, mientras que el 55,67 por ciento de ellos sí es consciente, pero tiene problemas para manifestarlo. Este dato contrasta con el 18,47 por ciento que es capaz de discernir y expresar su situación y con el 14,82 por ciento que solo son conscientes si se les explica de manera racional su situación.

"Es fundamental que los niños aprendan a identificar y expresar sus emociones. Esto se puede conseguir a través del juego al igual que una correcta sociabilización, consiguiendo en los niños una mayor sensación de felicidad y bienestar", ha apuntado la responsable de contenidos pedagógicos y miembro del Comité de Expertos, Sonia Pérez.

Respecto a los juegos de los menores, tienen especial relevancia las bicis y vehículos, los de construcción y lógica y todos los que implican música, manualidades u otras formas de arte.

Preguntados a los padres por cómo contribuyen a la felicidad de sus hijos y a que sean más conscientes de esta actitud vital, la opción mayoritaria es la de enseñarles valores para que sea un adulto feliz (45,75%), seguida de pasar más tiempo con ellos (24,91%) y hasta un 11,22% de los padres lo hace a través del elogio y el refuerzo positivo.

Con el objetivo de ayudar al desarrollo de los futuros adultos, Imaginarium ha lanzado el programa 'Aprendiendo a ser feliz', para reforzar su compromiso con los padres y la sociedad.

Esta iniciativa nace para ofrecer herramientas y contenidos útiles y fáciles que enseñen a los padres a educar en la felicidad, educar en valores a través del juego. El programa desarrollará cada mes uno de los ejes que conforman la felicidad, dará pautas y ejercicios prácticos a través de sesiones de coaching en distintas ciudades de España y contenidos en el blog 'La puerta pequeña'.