El juez mantiene detenidos por 72 horas a los padres del niño británico enfermo

  • Decidirá en 72 horas si deja libres a los padres del niño británico

El juez Ismael Moreno ha prolongado por un máximo de 72 horas la detención de los padres del niño británico que fue sacado sin consentimiento médico de un hospital de Southampton, a la espera de recibir un informe que ha requerido con carácter urgente del hospital de Málaga en el que está ingresado el pequeño.

Según el abogado del matrimonio, Juan Isidro Fernández Díaz, los padres -que fueron detenidos el sábado cuando se encontraban con el niño, Ashya King, y sus otros hijos en un hostal de Vélez Málaga- se trasladaron hasta allí para tratar de vender un piso que tienen en Málaga y poder pagar a su hijo un tratamiento alternativo a la quimioterapia en los Estados Unidos o la República Checa.

"En ningún momento ha corrido riesgo la vida del niño", ha asegurado el abogado, al indicar que el padre "sabe controlar la máquina que le alimenta perfectamente".

De hecho ha insistido en que el niño ingresó en perfecto estado de salud en el hospital de Málaga cuando fueron detenidos sus padres y ahora le acompaña su hermano Daniel de 23 años.

Tras declarar ante el juez y negarse a ser entregados al Reino Unido, el matrimonio ha quedado en situación de detención judicial por un plazo máximo de 72 horas, periodo que pasarán en la prisión madrileña de Soto del Real y tras el cual su abogado confía en que quedarán en libertad "mañana o pasado mañana".

Una vez salgan de prisión, "los padres tendrán completa libertad para llevar a su hijo a otro hospital, que es lo que están buscando", ha insistido Fernández Díaz, al añadir que no "tiene nada que ver la cuestión religiosa -los padres son testigos de Jehová- sino que lo que tiene que ver es el amor que le han profesado y para eso le han traído a España".

"Estos padres quieren a sus hijos. Son padres de otros seis hijos, los quieren profundamente y todo lo que se ha hecho es manipular la información y faltar a la verdad", ha lamentado.

Ante el juez, los padres han tratado de demostrar que el niño ha sido ya operado en Inglaterra de un tumor cerebral y que no había otras posibilidades más que el tratamiento de radioterapia y quimioterapia con el que no estaban de acuerdo y por ello querían otra opción que es posible en la República Checa y también en los Estados Unidos.

Para ello han aportado una serie de correos electrónicos que el padre ha intercambiado con médicos checos en busca de ese "tratamiento superior" para su hijo, según su abogado.

DESESPERADOS POR LA SITUACIÓN

Respecto a cómo se encuentra la pareja, el letrado ha señalado que el matrimonio está desesperado por la situación y por cómo se ha manchado su reputación, por lo que tienen previsto interponer una querella contra el hospital británico del que sacaron a su hijo por denuncia falsa y calumnias.

Los padres han comparecido durante media hora ante el juez y se han negado a ser entregados a la autoridades británicas, que el pasado jueves emitieron una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) contra el matrimonio por secuestro y malos tratos.

Al haberse negado a su entrega, el juez Moreno deberá únicamente decidir en ese plazo de 72 horas si envía o no a prisión a la pareja, ya que la reclamación de las autoridades británica deberá ahora resolverla en una vista un tribunal de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

La Policía Nacional encontró el sábado al niño a las 20:30 horas en el Hostal Esperanza de Benajarafe, núcleo de Vélez Málaga, tras el aviso de la recepcionista del establecimiento, que había visto en televisión el aviso policial solicitando ayuda para localizar al niño y la matrícula del vehículo en el que se trasladaba la familia.

Al emitir la orden de detención el pasado jueves, la Interpol informó a las fuerzas de seguridad españolas de que disponían aproximadamente de doce horas para localizar al niño, ya que este portaba una máquina de alimentación con baterías que tienen autonomía para ese periodo de tiempo.

En un vídeo colgado en Youtube, el padre del niño aseguró que se lo llevaron para que pudiera recibir un tratamiento que el hospital no le había ofrecido, algo que el centro médico ha negado.

En el vídeo, antes de que se produjera su detención, Brett King aseguró que estaban cuidando bien de su hijo y que era "ridículo" haber lanzado la orden internacional de búsqueda y que la policía los tratase como secuestradores.

La policía británica defendió ayer su decisión de lanzar una búsqueda internacional del niño enfermo.

El subcomisario del condado inglés de Hampshire, Chris Shead, subrayó que la eurooorden de arresto se emitió después de los médicos del hospital donde estaba ingresado el niño, Ashya King, advirtieran de se encontraba en grave peligro si no recibía tratamiento.