El 80% de los jóvenes dice haber visto conducir a sus amigos bebidos o drogados

Más de la mitad de los jóvenes asegura haber impedido que un amigo condujera ebrio o drogado, según se desprende del estudio 'Los Hábitos de los Jóvenes al Volante', realizado por Fundación Mutua Madrileña entre 3.533 jóvenes de entre 18 y 25 años de 14 ciudades españolas, en el marco de la campaña 'Agárrate a la Vida', que desarrolla conjuntamente con la Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal (AESLEME).

El estudio también revela que un 80% de los jóvenes confiesa haber visto a algún amigo coger el coche tras consumir alcohol o drogas, y a la hora de confesar las imprudencias propias, que no las de los amigos, un 27% de los chicos confiesa haber bebido alguna vez antes de conducir, mientras que el 73% afirma no hacerlo nunca.

En cuanto a las distracciones por nuevas tecnologías, uno de cada tres jóvenes reconoce que escribe mensajes de Whatsapp o SMS mientras conduce y la misma proporción confiesa haber mantenido alguna vez conversaciones telefónicas al volante sin utilizar un dispositivo de manos libres.

Otra área de imprudencia es el incumplimiento de las normas de circulación pues, a pesar de ser del grupo de edad que tiene más reciente el aprendizaje de las normas, en ocasiones los jóvenes se muestran laxos en el cumplimiento de ciertas medidas, especialmente en cuanto al límite de velocidad, que uno de cada tres confiesa no respetar.

En cualquier caso, el estudio ofrece otros datos "más alentadores", como el hecho de que cuatro de cada diez entrevistados (39%) apuesta por medidas como el 'conductor alternativo', que consiste en salir en grupo y turnarse para conducir, de forma que el conductor se compromete a no beber alcohol la noche que le toca, para poder llevar al resto del grupo a casa.

El estudio 'Los Hábitos de los Jóvenes al Volante' forma parte de la campaña 'Agárrate a la Vida', que la Fundación Mutua Madrileña puso en marcha en 2010 con AESLEME para prevenir los accidentes de tráfico entre los jóvenes y que se lleva a cabo en centros universitarios públicos y privados españoles.

Cada año alrededor de 5.500 alumnos universitarios participan en esta campaña de educación vial. Desde 2010 se han impartido más de 600 conferencias a cerca de 30.000 universitarios españoles de centros públicos y privados de toda España.

Los resultados obtenidos indican la necesidad de seguir desarrollando campañas específicas de seguridad vial hacia este colectivo, no solo de cara a reducir sus actuales ratios de siniestralidad, sino también como medida de prevención de cara al futuro. Además, ponen de manifiesto la importancia de continuar con la labor de concienciación sobre las consecuencias del consumo de sustancias al volante o de las distracciones y del incumplimiento de las normas de circulación, según sus impulsores.

RECOMENDACIONES

En este sentido, la Fundación Mutua Madrileña y AESLEME han elaborado una serie de recomendaciones para los más jóvenes, entre las que se explica cómo el consumo de alcohol y drogas repercute en la percepción y el tiempo de reacción al volante; altera la capacidad para juzgar la distancia (adelantamientos, curvas, distancia de seguridad, etc.) y provoca una falsa sensación de control, entre otros.

Igualmente, enumera los principales consejos para evitar distracciones al volante, entre los que destacan evitar el manejo de dispositivos electrónicos, como el del GPS, que debe programarse siempre con el coche detenido, no dejar de utilizar nunca las dos manos al volante --por comer o fumar, por ejemplo-- o reducir la atención en los trayectos habituales.