Un muerto y 17 heridos en la explosión de un edificio de Premià de Mar

  • "Me pareció que era un trueno y se me vino la casa encima"

Uno de los heridos en la explosión de hoy en un edificio de Premià de Mar (Barcelona), donde ha fallecido una persona, se encuentra en estado crítico, según ha informado a Efe el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), que ha elevado a 17 el número de heridos.

Según el SEM, en total han sido 18 personas las afectadas: un fallecido, un herido que está en estado crítico, dos graves, uno menos grave y el resto con heridas leves.

Los heridos más graves están hospitalizados en el Hospital del Vall d'Hebron de Barcelona y Germans Trias i Pujol (Can Ruti) de Badalona (Barcelona), mientras que el resto han sido trasladados a otros centros sanitarios, y algunos ya han sido dados de alta.

El SEM ha enviado al lugar del siniestro 10 ambulancias, un helicóptero medicalizado, un mando y un equipo de psicólogos para atender tanto a las víctimas como a sus allegados.

"ME PARECIÓ QUE ERA UN TRUENO Y SE ME VINO LA CASA ENCIMA"

"Me pareció que era un trueno y enseguida se me vino la casa encima". María José, una de las vecinas de los tres edificios afectados por la explosión de Premià de Mar (Barcelona), se ha levantado hoy con el mayor susto de su vida.

No es para menos puesto que una deflagración, registrada a las 8:25 horas en la segunda planta del número 194-198 de la Gran Vía de Premià, la ha despertado de un sobresalto, con todos los cristales de las puertas y ventanas de su casa rotos, incluso los marcos arrancados de cuajo. "Parecía Sarajevo", apunta gráficamente.

Ella es una del cerca de centenar de familias afectadas por la explosión en una segunda planta, en la que ha muerto una persona y otras 17 han resultado heridas, dos de ellas de carácter grave. Un piso ha quedado destruido y dos colindantes abrasados por la deflagración. Pero decenas de pisos han sufrido desperfectos en marcos y cristales por la onda expansiva.

Diversos testigos han relatado que uno de los afectados por el incendio posterior a la explosión ha estado a punto de saltar desde un tercer piso, desde el balcón, para no quemarse por las llamas.

Pero los vecinos -la casa da a una zona interior de edificios y una piscina comunitaria- le han animado a aguantar y no saltar. Al final, con una cortina que ha logrado enrollar a la barandilla del balcón, ha conseguido deslizarse, saltar y escapar de las llamas.