Un estudio advierte de la brecha de género en las vocaciones científicas

Laboratorio de Valmayor
Laboratorio de Valmayor

La Universidad Camilo José Cela ha elaborado un estudio que refleja la "gran brecha" en vocaciones científicas que existe entre los chicos y las chicas en España.

Bajo el título 'La educación científica en las Comunidades Autónomas. Conocimientos y competencias a la luz PISA 2015', el informe propone evidencias científicas, áreas de mejora y actuaciones en el ámbito educativo para incorporar a más mujeres a las carreras científicas y tecnológicas.

Es la primera vez que un estudio analiza en cada una de las regiones españolas los datos de PISA 2015 y los cruza con la influencia de la variable sexo en el interés por la ciencia.

España tiene un importante déficit de vocaciones

La Cátedra de Políticas Educativas de la Universidad Camilo José Cela, dirigida por Francisco López Rupérez, dará a conocer las conclusiones del estudio académico que ha liderado junto a Isabel García García y Eva Expósito Casas el próximo lunes a las 16.30 en la sede de la calle Almagro.

La investigación aporta un diagnóstico territorializado por Comunidades Autónomas sobre la relación que existe entre el rendimiento académico en Ciencias y las vocaciones STEM, el desempeño de las CC.AA. en materia de competencias y de conocimientos científicos, la influencia del nivel socioeconómico y cultural, y la influencia de la variable sexo en el interés por estas materias.

"Con la cuarta revolución industrial ya en marcha, la educación científica es un área clave para el desarrollo de las habilidades y de las competencias requeridas por la economía y la sociedad del siglo XXI", señala la Camilo José Cela en un comunicado.

Los grandes nichos de trabajo del futuro están en el área STEM, precisamente un área en el que los datos manifiestan que España tiene un importante déficit de vocaciones, especialmente intenso en el caso de las chicas. Solo un 16,3 por ciento de los jóvenes de 15 años se ven trabajando en una profesión STEM cuando sean adultos.

Para disminuir la brecha de género, el estudio propone actuar, desde las práctica docente, en áreas como la autoconfianza de las alumnas, el apoyo de sus iguales y compañeros y el aumento de la implicación de las madres, pues se ha observado una relación entre cada uno de esos tres factores y el desempeño en las materias de ciencias que es más intensa para las chicas que para los chicos. Además, la intervención en la Educación Secundaria Obligatoria resulta a este respecto decisiva.