Un niño escribe una carta al Rey para pedirle que interceda por él para que le operen de escoliosis

El Rey, Juan Carlos I
El Rey, Juan Carlos I |Telemadrid

Un niño valenciano que padece esclerosis torácica ha escrito una carta al Rey Juan Carlos a través de Facebook para pedirle que interceda por él para que le operen de escoliosis los mejores especialistas posibles ya que sólo tiene un dos por ciento de probabilidades de salir vivo del quirófano.

Edu es un niño de tan solo seis años que ya a su corta edad sabe lo que es derrotar a la leucemia, luchar contra la enfermedad del síndrome de Guillain-Barré (que afecta a su aparato locomotor) y sobrevivir día a día a la escoliosis torácica que está acabando con su vida.

Ahora tiene un nuevo reto que superar, puede pasar por el quirófano para intentar sobrevivir a esa escoliosis (tan solo tiene un dos por ciento de probabilidades de salir vivo de la mesa de operaciones) o dejarse llevar por la enfermedad.

En declaraciones a Europa Press Televisión, su tío, Enrique Calvo, ha indicado que aunque es un niño fuerte, la escoliosis "le está quitando la vida". "Sólo hay dos alternativas, un tratamiento mediante corsés, que a él no le hacen efecto, y luego el quirófano; por eso nos centramos en el quirófano, pero solo hay un dos por ciento de que salga y hay que ser realistas, el niño se nos puede ir, pero yo creo en Edu al cien por cien y sé que ese dos por ciento lo puede convertir en un diez o un quince", ha recalcado.

Para Enrique, cada persona afronta el quirófano de una manera distinta, "cada persona es un mundo", y confía en la fuerza de voluntad y en las ganas de vivir del pequeño, quien con ayuda de "los mejores especialistas puede salir adelante".

LA CARTA AL REY

Ahora, con las Navidades a poco menos de un mes lo que pide Edu es "ponerse bueno" y por este motivo, ya que no cree en los Reyes Magos, le cuenta al Rey que "al igual que a él le han puesto bien de las piernas", él desea para estas Navidades que "le pongan bien de la espalda".

"Estamos a la espera de recibir alguna noticia, su Alteza es una persona muy humana, tiene una vida muy estresante, tiene muchos paragolpes para que no le invadan; pero sé que de algún modo u otro se pondrá en contacto para que su círculo de amigos, de especialistas, se pongan en contacto con nosotros para que Edu tenga la mejor solución", ha señalado Enrique.

Mientras el milagro ocurre, Edu y su familia se quedan con los buenos momentos que han pasado durante estos seis años, sus paseos en bicicleta y sus buenas notas en el colegio. "Edu sabe a día de hoy lo que es no poder caminar, lo que no es poder correr, pero también sabe lo que es disfrutar viendo a los demás disfrutar; es muy fuerte a nivel psicológico y emocional", ha recordado.