Es temporada de calçots y de hecho podría ser una de las mejores en precio, calidad y producción. En el mercado central de Mercabarna en Barcelona se podrían superar este año los 13 millones de unidades vendidas.
El calçot es una cebolla de segundo año, tierna, dulce y se caracteriza por la manera que está cultivada. Se denomina calçot porque se va calzando en la tierra hasta conseguir una cebolla alargada. Llegan de Tarragona y Barcelona, pero la moda empieza a extenderse por toda España. También en Madrid se cocinan en diferentes restaurantes.
Celebrar una calçotada es una buena manera de reunirse con amigos o la familia, y además a un precio muy asequible. El secreto está en la viveza de la llama y en la salsa, elaborada con almendras, avellanas y tómate.
