Un brazo robótico movido por el pensamiento

  • El hallazgo lo han logrado científicos norteamericanos con pacientes paralizados de cuello para abajo
  • Un sensor implantado en el cerebro envía las órdenes a un ordenador

En un ensayo clínico , una mujer paralítica ha sido capaz de alcanzar, y tomarse una bebida por su cuenta - por primera vez en casi 15 años - mediante el uso de sus pensamientos, para dirigir un brazo robótico. El estudio, financiado en parte por los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos, está evaluando la seguridad y viabilidad de un dispositivo de investigación, llamado Sistema de Interfaz Neuronal BrainGate -un tipo de interfaz cerebro-ordenador - diseñada para poner a la robótica y otras tecnologías de asistencia bajo el control del cerebro.

El informe, publicado en 'Nature', ha descrito cómo dos individuos -con parálisis debido a un accidente cerebrovascular- aprendieron a utilizar el sistema BrainGate para alcanzar y agarrar objetos con un brazo robótico. El informe pone de relieve el potencial de uso, a largo plazo, y la durabilidad, del sistema BrainGate -parte del cual se implanta en el cerebro para captar las señales que subyacen el movimiento intencional.

Para la mujer que participaba en el estudio, esta fue la primera vez, desde su accidente cerebrovascular, que pudo tomar una bebida sin la ayuda de un cuidador. "La sonrisa en su rostro era notable. Nos alienta que la investigación esté progresando como todos habíamos esperado", afirma el principal investigador del estudio, Leigh Hochberg, profesor asociado de Ingeniería en la Universidad Brown, en Providence, y neurólogo de cuidados intensivos del Hospital General de Massachusetts, en Estados Unidos.

"Años después de la aparición de la parálisis, observamos que aún era posible registrar las señales cerebrales que llevan información multidimensional sobre el movimiento, y que estas señales se podrían utilizar para mover un dispositivo externo," explica Hochberg, quien señala que la tecnología está a años de su uso práctico, y que los participantes en los ensayos utilizaron el sistema BrainGate bajo condiciones controladas en sus hogares, con un técnico siempre presente.

El sistema BrainGate consta de un sensor para monitorear las señales del cerebro, y de un software y un hardware que convierten estas señales en comandos digitales para dispositivos externos. El sensor es un pequeño cuadrado de silicio, que contiene 100 electrodos, delgados como un cabello, que pueden registrar la actividad de pequeños grupos de células cerebrales - éste se implanta en la corteza motora, una parte del cerebro que dirige el movimiento.

El objetivo final de esta investigación es ayudar a las personas con parálisis a volver a conectar el cerebro a los miembros paralizados, en vez de a robots, según afirman los investigadores. En el futuro, el sistema BrainGate podría ser usado para controlar la estimulación eléctrica funcional del dispositivo, ofreciendo un estímulo eléctrico a los músculos paralizados.