José Enrique Abuín Gey, alias 'El Chicle', volverá la próxima semana a sentarse en el banquillo de los acusados para responder por uno de los crímenes más mediáticos de los ocurridos en los últimos años en Galicia, la desaparición y asesinato de la joven madrileña Diana Quer, por la que se enfrenta, como autor confeso y único acusado, a la pena de prisión permanente revisable.
El proceso arrancará en los Juzgados de Fontiñas más de tres años después de la misteriosa desaparición de Diana, a la que se perdió la pista el 22 de agosto de 2016, cuando regresaba a su casa de veraneo caminando desde las fiestas de la localidad coruñesa de A Pobra. Tenía solo 18 años.
Enrique Abuín será el primero en testificar ante un jurado popular. Inmediatamente después, los padres de Diana Quer.
Ante los ojos de El Chicle pasarán más de medio centenar de testigos y 40 peritos. Entre ellos agentes de la UCO, forenses, los buzos que extrajeron el cuerpo de la joven, vecinos, amigos...
Fiscalía y acusación particular tendrán que demostrar que Abuín, cometió, no sólo asesinato y detención ilegal. También que agredió sexualmente a Diana. Porque esa es la clave para que pueda ser condenado a prisión permanente revisable.
La defensa tratará de justificarlo como un accidente. Es su nueva versión, el Chicle asegura que pensó que era una gitana que iba a delatarle por robar gasoil a los feriantes. Al tratar de que no alertara a otros, la mató por accidente.
El cuerpo de Diana Quer fue localizado en un pozo de esta nave abandonada de Asados, en Rianxos. Atada y con bloques de hormigón lastrando sus restos. Hacía año y medio que había desaparecido cuando se dirigía a su casa desde las fiestas de A Pobra do Caramiñal.
1.164 días después comienza un juicio que durará 15 y quedará visto para sentencia.
