La Unión Europea, Premio Princesa de la Concordia 2017

  • La Unión Europea considera un "reconocimiento y honor" el Premio Princesa de Asturias

La Unión Europea ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2017, según ha hecho público este jueves en Oviedo el jurado encargado de su concesión. Este premio es el último de los ocho galardones internacionales que convoca anualmente la Fundación Princesa de Asturias, y que este año alcanzan su XXXVII edición.

El jurado encargado de otorgar el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2017 a la Unión Europea (UE) ha señalado este miércoles en el acta que "los valores de la UE "proyectan esperanza hacia el futuro, en tiempos de incertidumbre".

El jurado ha decidido conceder este premio a la Unión Europea cuando se cumplen sesenta años de la firma del Tratado de Roma. "La Unión Europea ha logrado el más largo período de paz de la Europa moderna, colaborando a la implantación y difusión en el mundo de valores como la libertad, los derechos humanos, y la solidaridad". "Estos valores de la Unión Europea proyectan esperanza hacia el futuro, en tiempos de incertidumbre, proponiendo un ejemplo de progreso y de bienestar", añaden.

LOS INICIOS

"Europa no se hará de una vez ni en una obra de conjunto, sino mediante realizaciones concretas, que creen en primer lugar una solidaridad de hecho". Estas palabras pronunciadas por Robert Schuman en su declaración del 9 de mayo de 1950 dejan entrever el sueño de una Europa unida tras uno de los períodos más cruentos de la historia contemporánea. Sesenta años después de la firma del Tratado de Roma, la UE representa un modelo único de integración política supranacional con base en una asociación pacífica, progresiva y libre de sus miembros.

La suma de diversos elementos como el mercado común (libre circulación de personas, mercancías, trabajadores y capitales), la moneda única, las políticas regional, agrícola y comercial, entre otras, o las garantías de estabilidad, prosperidad y respeto de los derechos humanos, así lo ponen de manifiesto. Durante estas seis décadas se ha logrado la reconciliación franco-alemana o la ampliación de las fronteras de la Unión hacia el este de Europa, entre otros hitos.

La firma del Tratado de París en 1951 creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA): una entidad supranacional promovida por Robert Schuman y Jean Monnet, ministro de Asuntos Exteriores y comisario general de Modernización y Equipamiento del Gobierno francés, respectivamente en aquel momento. Pensada sobre la idea de que, a medida que aumentara la interdependencia económica entre los países, disminuirían las posibilidades de conflicto, la CECA regulaba los sectores del carbón y el acero de Francia y Alemania, y estaba abierta a otros Estados miembros.

Fue el antecedente directo de la Europa de los seis: Francia, Alemania Occidental, Italia, Bélgica, Luxemburgo y Países Bajos. Posteriormente se crearían la CEE (Comunidad Económica Europea) -a la que España se adhirió en 1986- y la CEEA (Comunidad Europea de la Energía Atómica), cuya unión se pactó en 1957 mediante el Tratado de Roma. En 1993 la CEE se convirtió en la Unión Europea (UE). Desde 2009 la UE se rige por el conocido como Tratado de Lisboa, que sustituye al intento fallido de crear una constitución europea a comienzos del siglo XXI.

En los últimos tiempos, la UE ha fomentado una relación más integradora y constructiva con vecinos como Turquía, Oriente Próximo o el norte de Africa. Actualmente, 28 Estados miembros y más de 500 millones de personas son beneficiarios de una integración europea que, basada en el Estado de Derecho, ha demostrado ser un proyecto de paz en sí misma. Con todo, la Unión no solo gira en torno a la paz entre naciones sino que también constituye una comunidad de valores, asentados en la libertad y la justicia.

En este sentido, la UE debe seguir haciendo frente a nuevos retos como la salida definitiva de la crisis económica y social que se vive en el continente desde hace varios años o el reciente anuncio del Reino Unido sobre su salida como Estado miembro de la Unión, que ponen a prueba a una UE en constante evolución.

Desde la entrada en vigor del Tratado de Lisboa en 2009, la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE reúne en un único documento todos los derechos que figuraban en los tratados europeos anteriores, y desde 1998 el Parlamento Europeo apoya los derechos humanos mediante el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia. En 2012 la UE recibió el premio Nobel de la Paz por su contribución al avance de la paz, la reconciliación, la democracia y los derechos humanos en Europa.

LA UNIÓN EUROPEA CONSIDERA UN "RECONOCIMIENTO Y HONOR" EL PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS

Los representantes de las instituciones europeas consideraron un "reconocimiento y honor" que la Unión Europea (UE) haya sido distinguida hoy con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia, y valoraron el papel de España en la construcción europea. "Aceptamos en nombre de la Unión Europea este prestigioso galardón y agradecemos el reconocimiento y el gran honor que nos llega de España", dijeron los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk; el del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, y el de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en un comunicado conjunto.

Los representantes europeos subrayaron que el galardón "supone un reconocimiento excepcional en un año marcado por el 60 aniversario del Tratado de Roma". "Hace seis décadas los padres fundadores de la Unión sembraron la semilla de una Europa unida sobre las cenizas de una guerra devastadora. En el recorrido posterior se han forjado los lazos de una unión de pueblos que han permitido embarcar a los europeos en un proyecto de paz, democracia y prosperidad", señalaron. Recordaron asimismo que "hace treinta años España se sumó a esta aventura europea con entusiasmo y espíritu constructivo" y añadieron que "hoy es uno de los grandes protagonistas del proyecto europeo".