La NASA duda que el metano de Marte proceda de la Tierra

NASA y ESA colaborarán para traer muestras de Marte a la Tierra
NASA y ESA colaborarán para traer muestras de Marte a la Tierra |Telemadrid

Un investigador de la NASA se muestra escéptico sobre el descubrimiento de metano autóctono en Marte por el rover Curiosity, y piensa que en realidad proviene del mismo vehículo.

Kevin Zahnle, un científico del Centro Investigador Ames de la NASA en Moffett Field, California, expresó esta preocupación el mes pasado en un seminario organizado por Virtual Planetary Lab del Instituto de Astrobiología de la NASA. "Estoy convencido de que realmente están viendo metano", dijo. "Pero estoy pensando que tiene que venir del rover", informa Space.com.

La sonda Mariner 7 detectó trazas de metano cerca del polo sur de Marte en los años 70, provocando un misterio durante décadas, que se agrandó con detecciones desde telescopios terrestres en 2003 y 2004.

Curiosity buscó sin resultado metano en la atmósfera de Marte seis veces entre octubre de 2012 y junio 2013. Pero unos meses más tarde, el robot detectó una repentino estallido de gas metano en cuatro mediciones a lo largo de un periodo de dos meses.

Trabajando duro para descartar posibles anomalías y vigilar la evolución de ese estallido en el tiempo, el equipo de Curiosity esperó un año entero antes de anunciar los nuevos resultados en una reunión de la Unión Geofísica Americana en diciembre de 2014. Un artículo fue publicado en la revista Science en enero. Si microbios estaban al acecho debajo de la superficie de Marte o si la geología tenía que ver en esas emisiones, el Planeta Rojo bien podría estar vivo de alguna manera después de todo.

Zahnle, quien también fue crítico con los informes de metano 2003 y 2004, dijo que el rover podría estar llevando a los científicos por mal camino en este caso. Después de todo, el rover contiene dentro de una cámara algo de metano a una concentración 1.000 veces superior a las trazas supuestamente encontradas en la atmósfera de Marte.

Al aterrizar en el cráter Gale, el espectrómetro láser sintonizable del rover desprendió una inusualmente alta lectura de metano. Los científicos del equipo rápidamente se dieron cuenta de que un poco de aire terrestre se había filtrado en el instrumento mientras el rover estaba depositado en la plataforma de lanzamiento de Cabo Cañaveral en Florida. Se extrajó la mayor parte del metano, manteniendo una pequeña cantidad de muestra para fines de calibración.

Pero el equipo de Curiosity insiste en que se sabe que esta fuente no ha interferido con el descubrimiento. "Estamos monitoreando continuamente esa cantidad de metano, y no ha habido evidencia de fuga durante toda la misión", dijo Chris Webster, científico investigador senior en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California, y autor principal del reciente estudio del metano. "Y si bien es cierto que la concentración de metano en esa cámara es 1000 veces mayor que en la atmósfera de Marte, la comparación es en realidad engañosa."

"Hay que mirar la cantidad de metano, no la concentración", explicó. "La concentración de metano en el rover puede parecer alta, pero la cantidad real es muy pequeña porque la cámara es muy pequeña. Para producir la cantidad que hemos detectado en la atmósfera de Marte, haría falta la fuga de una botella de gas de metano puro en el rover. Y simplemente no la tenemos".

Zahnle también sostiene que el aire terrestre podría haberse infiltrado en otras áreas en el rover. "Descartar el rover del todo como una causa es una cosa difícil de hacer", dijo. "Tendrías que conocer todos los lugares donde se podría almacenar metano."

Pero Paul Mahaffy, investigador principal del instrumento Análisis de las muestras de Curiosity en Marte (SAM), pone en duda que el rover podría ser una posible fuente. "Parece poco probable que después de más de un año en la superficie de Marte aparezca una fuente repentina de metano de la nave espacial, persista durante 60 días y luego desaparezca", dice. "El metano es un gas muy volátil, y cualquier metano residual traído a Marte debe ser cosa del pasado".