El astronauta Frank Rubio regresa a la Tierra tras 371 días perdido en el espacio

  • El astronauta de la NASA que más tiempo ha pasado en el espacio

La nave rusa Soyuz MS-23 se desacopló del módulo Prichal de la Estación Espacial Internacional (EEI) para traer de vuelta a la Tierra a los cosmonautas Serguéi Prokópiev y Dmitri Petelin, y al astronauta estadounidense de origen salvadoreño, Frank Rubio, tras pasar el hispano el récord de 371 días continuos en el espacio.

El desacoplamiento se produjo a las 07.54 GMT, algo más de dos horas después de que se cerraran las compuertas y se despidieran los tres de los tripulantes que permanecerán en la EEI: los astronautas de la NASA Loral O'Hara y Jasmin Moghbeli, el astronauta de la Agencia Espacial Europa (ESA), Andreas Morgensej, el japonés Satoshi Furukawa, y los cosomonautas rusos Nikolái Chub y Konstantín Borísov.A la hora del desacoplamiento la EEI volaba sobre el sureste de Mongolia.

El aterrizaje de la cápsula de descenso está prevista para las 11.17 GMT a 148 kilómetros al sureste de la localidad de Zhezkazgán, en la estepa kazaja y a su encuentro acudirán 200 militares, helicópteros Mi8, aviones An-12 y An-26, así como equipos terrestres, incluidos vehículos de rescate PEM-1 y PEM.

Rubio, que efectuó su primera misión espacial a la EEI, aterrizará en el cosmódromo ruso de Baikonur con un récord en su haber para un solo viaje a la plataforma orbital. "Es el vuelo espacial más largo en la historia espacial estadounidense", señaló la NASA durante la transmisión directa del desacoplamiento.

Para los tres tripulantes es de hecho el vuelo continuado más largo en toda la historia de la EEI. Los anteriores récord se registraron en la estación rusa Mir. Allí los cosmonautas Valeri Poliakov y Serguéi Avdéyev, que pasaron 437 (1994-1995) y 379 días (1998-1999), respectivamente en el espacio. Prokópiev, Petelin y Rubio llegaron a la EEI el 21 de septiembre de 2022 inicialmente para una misión de seis meses.

Debían haber regresado en marzo pasado, pero se quedaron seis meses varados en la plataforma orbital internacional debido a una avería en el circuito de refrigeración de la Soyuz MS-22 que les debía devolver a tierra firme.