A pesar de los recursos presentados por los padres de la pequeña Indi Gregory para que no desconectaran el soporte vital a su hija y trasladarla a un hospital de Italia, la Justicia británica finalmente ha rechazado todas sus alegaciones y el Hospital ha decidió desconectar las máquinas que le mantenían con vida desde el pasado mes de septiembre.
Indi Gregory, de 8 meses de edad, permanecía conectada a unas máquinas que la mantenían con vida. La pequeña sufre una rara enfermedad mitocondrial que significa que sus células no producen suficiente energía.
La justicia británica rechazó la petición de los padres
Los médicos del hospital Queen's Medical Center de Nottingham (Reino Unido), decidieron desconectar finalmente las máquinas que la mantenían con vida. La pequeña, por lo tanto, ha fallecido.
Este mismo sábado, el Papa Francisco ofreció sus oraciones por la niña británica. El Hospital Bambino Gesù había dado su disposición a acogerla. Sin embargo, el Tribunal Superior de Londres negó en los últimos días la posibilidad de traslado a Italia, tras recibir la ciudadanía, para recibir tratamiento.
Esto ha abierto un nuevo debate en redes sociales, en donde se ha mostrado el dolor por el desenlace de esta historia.
