Cae una red de pedofilos con 31 detenidos y 145 víctimas menores de edad

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Guardia Civil |Telemadrid

La Guardia Civil y el FBI han detenido a 31 personas -una de ellas en Madrid- e identificado a 145 menores captados para participar en una plataforma de internet en las que las víctimas grababan vídeos de contenido sexual en lo que se ha conocido como la operación Craven.

En España han sido detenidas tres personas y se han identificado a ocho menores. El grueso de la operación se ha practicado en EEUU. Las investigaciones se iniciaron hace tres años después de que la Guardia Civil recibiera una información del grupo contra la explotación sexual del FBI.

'Cazaban' a niñas de entre 8 y 14 años de edad por redes sociales

Una parte de los detenidos se dedicaba a ‘cazar’ a niñas de entre 8 y 14 años de edad por redes sociales, a las que invitaban a participar en la plataforma. Después, se ganaban la confianza de los menores con juegos propios de su edad y les incitaban a seguir otras prácticas con contenido sexual a través de su webcam.

Registros en Alicante y Getafe

El primer registro practicado en España fue en 2018 en Alicante, donde se detuvo a un hombre que el 11 de abril pasado fue condenado a 180 años de cárcel. Tras analizar el material intervenido, la Guardia Civil descubrió que esta persona ejercía un rol de liderazgo dentro de su grupo.

Más tarde, concretamente en octubre de 2018 se realizó un segundo registro en Getafe. El investigado se encontraba fuera de España, y fue detenido a su regreso en el aeropuerto. Los agentes descubrieron que había utilizado diversas identidades ficticias y técnicas de engaño para captar a sus víctimas, todas ellas menores.

Pedía a las menores que se desnudasen e hicieran acciones sexuales

En un principio, el detenido usaba un juego que comenzaba siendo inocente, donde pedía a las menores que saludasen, sacasen la lengua o lanzasen un beso. Con la realización de cada acción recibían una serie de puntos. Según avanzaba el juego, pedía a las menores que se desnudasen y realizaran comportamientos de alto contenido sexual.

Con una de las víctimas del detenido en Getafe los hechos se desarrollaron de forma más sostenida en el tiempo. En este caso, para obtener información de la menor, el investigado utilizó varios sistemas de “phishing”, una modalidad de estafa que consiste en mandar correos electrónicos haciéndose pasar por una entidad real para obtener datos personales.