Armas simuladas que se convierten en muy reales y letales

  • La policía detecta un incremento de delitos cometidos con armas simuladas
  • Las armas simuladas de simple detonación modificadas pueden llegar a disparar proyectiles de fuego real

La policía detecta un incremento de delitos cometidos con armas simuladas, que en un principio sólo sirven para detonar. También se incautan cada vez más de pistolas de este tipo modificadas para convertirlas en armas reales. Son más baratas y fáciles de conseguir que una auténtica, y más peligrosas también porque pueden explotar en la mano. En Madrid han sido protagonistas de atracos como estos que van a ver.

Marzo de 2010. Violento Atraco en esta gasolinera de Madrid, el arma es simulada... Junio de 2011. Atraca una surcursal bancaria a punta de pistola. También simulada. No siempre es así... Lo cierto es que se ha detectado que cada vez se modifican más armas simuladas o de simple detonación, para convertirlas en armas reales de fuego.

Angel Rivera, Capitán Interventor de Armas y Explosivos de la Guardia Civil explica que son armas que sólo detonan, pero tan conseguidas que en realidad parecen armas de verdad, y "son susceptibles de modificar y poder convertirlas en armas de fuego real". Reales y letales si quien la modifica tiene la pericia técnica para hacerlo. Se suele modificar el cañón que llevan y se les pone uno de acero con sus correspondientes estrías y "su recámara para que admita cartuchos del 6,35", comenta un técnico experto en balística, que no puede dar la cara.

Un arma de detonación cuesta unos 100 euros, y la puede adquirir cualquier mayor de edad, mientras que un arma de fuego real, en el mercado negro cuesta unos 3.000 euros. Esta es una de las razones por las que se ha incrementado su uso entre los delincuentes.

Estas son sólo una pequeña parte de las más de 3.300 armas de fuego que destruirá la Guardia Civil, en unos días... Pero la más deseada por los delincuentes sigue siendo una de las más peligrosas, por su potencia y por la facilidad para conseguir munición, sigue siendo el rifle de "cañón recortado".

"Recortan sus cañones y son muy fáciles de ocultar, además de muy potentes y fácil de conseguir los cartuchos", afirma Rivera, capitán de la Guardia Civil.

De las que se van a destruir, 2000 son armas largas, escopetas y rifles... 1300 son armas cortas, pistolas y revolveres... El 90 por ciento de ellas son de particulares que han perdido la licencia.