A todos nos gusta hacer de nuestra casa un hogar, pero si el lugar donde habitamos es un castillo, un palacio o una mansión impresionante, seguro que la vida se ve de otra manera. Es el caso de unos cuantos privilegiados a los que por herencia o suerte, les ha tocado presumir de increíbles patrimonios de belleza única. Esta semana nuestra reportera Olivia ha salido en busca de estos propietarios y sus mansiones con historia.
Como el castillo de Castilnovo en Segovia, una antigua residencia palaciega por la que pasaron los Reyes Católicos y de la que cuenta la leyenda estuvo, no saben si alojada o encerrada, Juana la Loca tras la muerte de su adorado Felipe el Hermoso. O el palacio de los Duques de Alba en Cáceres que conoceremos de mano del periodista Máximo Pradera, uno de los 15 herederos del lugar donde hasta mediados de los 70 residió su tío, el escritor y premio Cervantes, Rafael Sánchez Ferlosio. También en Cáceres se encuentra la alucinante mansión de una familia que no paró hasta comprar un palacio del siglo XVI, una vivienda que reformaron a conciencia durante 3 años y que ocupa una de las murallas romanas del centro histórico de la ciudad. También peculiar fue el capricho de otra familia que decidió convertir una iglesia de Segovia del siglo XIII en la que habitaban los monjes trinitarios, en su casa de verano.
También nos acercaremos al casco histórico de Toledo, donde 13 hermanos heredaron el Cigarral de la Presilla, un enclave con las mejores vistas de la ciudad construido por sus abuelos en 1931 y de los pocos que cumple los requisitos de ser tal y como eran los cigarrales, es decir las antiguas casas de recreo señoriales a orillas del río Tajo.
Por último visitamos en Torrelodones una de las 5 fincas más grandes de la zona, con 12 hectáreas en pleno parque de Guadarrama tan espectaculares que hasta el rey Felipe VI pasó parte de su infancia aquí. Una finca excepcional que ahora se rifan productoras de cine y publicidad para sus rodajes.
