La Guardia Civil no pudo desalojar ayer el Palacio de Moratalla, en Hornachuelos (Córdoba), cuyos jardines fueron ocupados por varios jornaleros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), por la tardanza de su dueño para denunciar los hechos, que impidió la resolución judicial necesaria para ordenarlo. Así lo han informado fuentes policiales después de que cerca de 300 jornaleros hayan retomado esta mañana su marcha a pie con destino Córdoba para protestar por la política de recortes y la situación derivada por la crisis económica tras abandonar la finca de ocho hectáreas, que se está acondicionando para un futuro hotel.
Los manifestantes aprovecharon ayer su paso junto al palacio para ocupar los jardines, a pesar del fuerte dispositivo empleado por la Guardia Civil para evitar cualquier tipo de altercado. Según las mismas fuentes, el propietario de la finca denunció "tarde y mal" la ocupación, motivo que retrasó la resolución judicial necesaria para ordenar el desalojo.
A las 8.00 horas de este miércoles y ante una gran presencia de agentes de la Guardia Civil, los jornaleros han roto el candado de la verja principal de las estancias palaciegas y han comenzado su marcha con destino a Posadas, donde tienen previsto almorzar.
El Palacio de Moratalla, ubicado en el kilómetro 40 de la A-431, cuenta con una finca de ocho hectáreas, en buena parte ajardinada y diseñada por el ingeniero y paisajista francés Forestier al estilo versallesco, y está bajo la tutela del Ministerio de Cultura.
Tras la comida, los convocados se dirigirán a Almodóvar del Río, donde previsiblemente pasarán la noche antes de afrontar la última etapa, que les llevará a Córdoba capital. El alcalde de Marinaleda y parlamentario de IU, Juan Manuel Sánchez Gordillo, ha asegurado en declaraciones a los periodistas que seguirán con la marcha porque "los pies están reventados pero el ánimo está como el primer día".
