Sánchez dice que otro Gobierno de Rajoy "agravaría más la confrontación" con Cataluña

  • Sánchez busca entenderse con Podemos y Ciudadanos para liderar una alternativa del PP: "Nos une el cambio"
  • Sánchez ofrece "diálogo" a Puigdemont y pide a Rajoy que haga lo mismo

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado que la situación en Cataluña no le llevará a renunciar a buscar una mayoría alternativa al PP, porque cree que "cuatro años más" del líder del PP, Mariano Rajoy, al frente de la Moncloa "agravaría aún más la confrontación".

Así lo ha señalado en una entrevista en la Cadena Ser, en la que ha defendido que no es incompatible que el PSOE apoye al Gobierno en funciones para que se respete la legalidad y el ordenamiento constitucional en España al mismo tiempo que busca una mayoría alternativa, para resolver otras crisis como el paro, la desigualdad y la corrupción.

Por ello, ha asegurado que los socialistas no facilitarán la investidura de Rajoy como presidente del Gobierno y ha afirmado que en España es "más urgente que nunca propiciar un cambio" para que "se abra una nueva etapa de reformas, de diálogo, de negociación" y se llegue a un acuerdo para "superar de una vez por todas este conflicto".

Así, el líder de los socialistas ha vuelto a defender que la salida a esta situación es la reforma de la Constitución. Por eso, ha insistido en que el PSOE apoya al Gobierno en todo lo que tiene que ver "la defensa de la legalidad", pero está convencido de que "construir" frentes ahora "no es la solución".

Para el líder socialista, el acuerdo entre Junts pel Sí y la CUP que ha permitido hacer presidente de la Generalitat al convergente Carles Puigdemont y continuar con el proceso independentista es "un autoengaño" porque "el 52 por ciento de los catalanes dijo no a la independencia" el pasado 27 de septiembre.

A su juicio, el acuerdo es "una errónea lectura" del resultado electoral por parte del bloque independentista y una deriva "que no va a ninguna parte" salvo a provocar mayor fractura.

Preguntado si, para lograr esa mayoría alternativa al PP, está dispuesto a recabar el apoyo de los independentistas catalanes, ha replicado que él no va a "buscar ese escenario", entre otras cosas, porque, a su juicio, éstos quieren más bien alimentar la confrontación.

"A ellos lo que les viene bien es que siga Rajoy", ha aseverado y acto seguido ha subrayado que cuando ha gobernado el PSOE ha garantizado la convivencia y que a un Gobierno socialista no se le ha planteado ninguna declaración unilateral de independencia. También ha recordado que un Gobierno socialista frenó el 'plan Ibarretxe' en el País Vasco.

Con todo, ha asegurado que el PSOE no va a "hacer ningún cordón sanitario" y que "no es momento de fijar líneas rojas ni de hablar desde atalayas", sino de hablar de lo que une a los partidos. Y a su juicio, lo que une al PSOE, a Podemos y a Ciudadanos es que los tres quieren una reforma constitucional, y también algunos dirigentes del PP catalán.

"LA REFORMA CONSTITUCIONAL SE ESTA ABRIENDO CAMINO"

"La reforma constitucional se está abriendo camino en términos discursivos, y eso es bueno", ha argumentado. Es más, ahora que incluso Rajoy ha abierto la puerta a esta reforma, le ha pedido que no lo haga sólo si gobierna, sino también si pasa a la oposición y que, en relación con Cataluña, sea tan leal con un Gobierno del PSOE como los socialistas están siendo con él.

Además, sobre la reivindicación de Podemos de que se haga un referéndum de autodeterminación en Cataluña --como condición para negociar su apoyo al PSOE--, ha recalcado que eso requeriría una reforma constitucional pero que "responde a una fractura con una fractura".

En cambio, ha subrayado que el PSOE quiere un referéndum, pero en el que voten todos los españoles y, además, que quiere una reforma de la Constitución que sea "integral". En todo caso, ha saludado que el líder de Catalunya Sí Que Es Pot --que incluye a Podemos en Cataluña--, Lluís Rabell, habló este domingo de que "las leyes están para respetarse".

DÍAZ CREE EL PROCESO CATALÁN UN DISPARATE Y PIDE UNIDAD EN DEFENSA DE LA LEY

La presidenta de Andalucía, Susana Díez ha dicho hoy que el denominado proceso catalán, tras la investidura del nuevo presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha sido "un espectáculo, un disparate, una barbaridad" que exige que todas las fuerzas políticas se unan en defensa de la Constitución.

En declaraciones a los periodistas durante una visita al Centro de Servicios Sociales Comunitarios Levante en Córdoba, Díaz ha señalado que "lo que pasó ayer fue un paso más en un disparate que lleva demasiado tiempo" y que está protagonizado "por parte de determinadas autoridades del Gobierno de Cataluña".

A su juicio, ayer en Cataluña decidieron "seguir avanzando en ese disparate", a pesar de que ningún gobierno autonómico ni ningún responsable público "puede actuar al margen de la legalidad". "Yo fui de las primeras en decir que estaba en contra del derecho a decidir, y el tiempo me está dando la razón, porque querían decidir lo que ya habían decidido, que era romper nuestro país, romper la convivencia, romper la concordia y el proyecto común que todos los ciudadanos queremos", ha apostillado la presidenta.