Rajoy recrimina a Amaiur que no pida la disolución de ETA, ni condene su historial criminal

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recriminado este miércoles a Amaiur que "todavía" no haya solicitado "la disolución incondicional" de ETA, no haya condenado la "historia criminal" de la banda terrorista ni haya "pedido perdón" a las víctimas. Dicho esto, le ha recalcado que su Ejecutivo no negociará con ETA sino que hará cumplir la ley.

De esta forma ha respondido en el Pleno del Congreso al diputado de Amaiur Xabier Mikel Errekondo, que le ha preguntado qué balance hace de sus años al frente del Gobierno ante "el nuevo escenario abierto" en el País Vasco.

El jefe del Ejecutivo ha afirmado rotundo que en estos dos años ha hecho "lo que debía hacer", de una manera "clara y transparente", al "cumplir y hacer cumplir la ley", "acatar las resoluciones judiciales" y "apoyar a las víctimas del terrorismo".

"Debería preocuparse más por el balance de su actuación y la de su grupo estos dos años. Todavía no han condenado la historia criminal ETA, todavía no le han pedido perdón a las víctimas, todavía no le han demandado a ETA su disolución incondicional. Es la única banda terrorista que existe hoy en el conjunto de la UE", ha enfatizado.

Dicho esto, el jefe del Ejecutivo ha asegurado que no le deben "nada a ETA ni a sus apoyos" sino que es la banda terrorista y aquellos que la apoyan los que "tienen un enorme saldo deudor con la sociedad española".

Rajoy ha subrayado que "no se negocia" para que "se deje de matar" ni "se paga por dejar de hacerlo". "Debe entender que un Gobierno no puede negociar ni va a hacerlo con ninguna organización terrorista. La obligación del Gobierno es cumplir la ley y hacerla cumplir y es lo es que hice y seguiré haciendo en el futuro", ha advertido.

AMAIUR PIDE A RAJOY QUE ESCUCHE A MANDATARIOS LATINOAMERICANOS

Previamente, el diputado de Amaiur ha reprochado a Rajoy que no escuche a los 14 exmandatarios latinoamericanos que "coinciden" en que el Gobierno "no ha hecho nada" ante la "oportunidad única" para la paz, una actitud que ha juzgado de "verdadera irresponsabilidad".

"La comunidad internacional sí entiende a la sociedad vasca y todos los expresidentes coinciden en valorar que estamos ante un momento histórico y ante una oportunidad única para construir la paz. Haga usted caso al mensaje que acaban de dirigirle los presidentes latinoamericanos", ha afirmado, para añadir que esta situación se debe abordar sin demora.

Desde su escaño ha exhibido un cartel en el que se podía leer "Sevilla II PreSOS" y ha insistido en que el Gobierno debe actuar ante la situación que se vive en las prisiones, que ha calificado como el "Guantánamo de España" porque, según ha dicho, hay presos vascos que "llevan más de cuatro años en régimen de aislamiento". Por eso, ha vuelto a pedir a Rajoy que se "libere de sus mandantes" y "deje de ser preso de estrategias ajenas".