El presidente catalán, Artur Mas, ha afirmado hoy que el "proceso" a favor de celebrar una consulta soberanista en Cataluña "continúa", pese a la "grave", "innecesaria" y "prevista" sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre la declaración de soberanía del Parlament.
"El proceso continúa; esta sentencia estaba prevista y es innecesaria. A cada escollo hallaremos una solución para esquivarlo y sobrepasarlo, y actuar democrática y pacíficamente de acuerdo con los marcos de legalidad vigentes, que son muchos y muy amplios", ha dicho Mas en la sesión de control del Govern al Parlament.
Mas se ha referido así a la sentencia del TC que ha anulado por unanimidad la declaración aprobada por el Parlament en enero de 2013 que definía a Cataluña como un "sujeto jurídico y político soberano", aunque reconoce el derecho a decidir del pueblo catalán si se lleva a cabo en el marco de la legalidad constitucional.
El president se ha aferrado a este último punto para mantener el proceso soberanista, pero se ha preguntado si al emitir dicha sentencia el alto tribunal realmente ejerce el papel de "árbitro de todos" los españoles.
El presidente catalán ha subrayado que lo "más grave" no es tanto el contenido del fallo, criticado también por ERC e ICV-EUiA, sino el hecho que se haya producido y haya anulado una declaración que es "política".
Pero Mas, pese a las apelaciones de PSC, PPC y Ciutadans para que cambie de rumbo, ha afirmado que seguirá con el proceso soberanista, un "reto democrático con mayúsculas" al que se debe contestar por "la vía política y no desde las sentencias" y con "cerebro" más que con "vísceras", y ha vuelto a invocar a la figura de Adolfo Suárez.
En relación a la sentencia del TC, Mas ha subrayado que "en una democracia, la libertad de expresión tiene miras muy amplias. Supongo -ha añadido- que hablar de la independencia puede no gustar, pero cabe dentro de la libertad de expresión".
El presidente catalán ha leído en el pleno un extracto de la sentencia a partir de la cual él considera que queda probado que el derecho a decidir cabe en la Constitución y a este precepto se ha aferrado para mantener su hoja de ruta, cuyo siguiente paso es el debate en el Congreso de los Diputados del 8 de abril para la transferencia de competencias de referendo.
Mas se ha manifestado crítico con el TC, poniendo en cuestión que sea un tribunal al servicio del conjunto de los españoles: "¿Qué hace el TC anulando una declaración política? (...) Es un árbitro al servicio de todos y algunos nos preguntamos si realmente hace de árbitro del conjunto del pueblo del Estado, y seguramente algunos tenemos la sensación que no es exactamente así".
Por su parte, el líder de ICV-EUiA, Joan Herrera, ha secundado la opinión de Mas al calificar de "insólito y sorprendente" que el TC valore una declaración política y ha considerado que el fallo pone de relieve que la consulta es una cuestión de voluntad política del PP.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha subrayado asimismo que la Generalitat y el Parlament "no se resignará ni se rendirá" ante lo que digan "órganos del Estado nombrados a dedo por dirigentes de partidos políticos".
PERE NAVARRO INVITA A MAS A "SUBIRSE AL AUTOBÚS DEL PSC
El primer secretario de los socialistas catalanes, Pere Navarro, ha instado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, a "subirse al autobús del PSC" y trabajar juntos para lograr una reforma de la Constitución, que haga posible una consulta de autodeterminación legal y acordada con el Estado.
En la sesión de control al Gobierno catalán en el Parlament, Mas le ha respondido que el Gobierno catalán siempre ha abogado por consensuar una consulta con el Estado, pero que es imposible acordar nada con el Gobierno central, "que no quiere pactar nada" con la Generalitat.
Mas ha asegurado que "el autobús, en estos momentos, es el de la mayoría", y ha asegurado que, si lo desean, los socialistas catalanes también pueden subirse a él.
