Los terroristas detenidos en Francia tenían material para fabricar explosivos

Oroitz Gurruchaga, presunto jefe del 'aparato militar' de ETA, y su lugarteniente, Xabier Aramburu, portaban en el momento de su detención el pasado domingo en el sur de Francia, un kilo de material para la fabricación de explosivos y varias ampollas de mercurio, utilizadas en estos artefactos. Así lo ha avanzado hoy el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en una rueda de prensa conjunta con su homólogo francés, Manuel Valls, con el que se ha reunido hoy en Madrid apenas 48 horas después de las dos últimas detenciones en Francia.

Este material ha sido hallado tras la inspección minuciosa del vehículo robado y con matrículas falsas en el que viajaban los dos terroristas cuando fueron detenidos en la localidad de Cauna.

Fernández Díaz ha destacado que esta información no ha sido proporcionada por ningún grupo de "verificadores internacionales" del alto el fuego de la banda terrorista, sino por los únicos verificadores que necesita el Gobierno, esto es, la Policía y la Guardia Civil.

Además de ese material, los terroristas detenidos tenían en su poder siete placas falsas de matrículas francesas, diversa documentación falsa de ciudadanos españoles, italianos y franceses, además de dos ordenadores con sus correspondientes discos duros.

"No es normal que los ciudadanos normales vayan armados, con documentación falsa, con vehículos robados y material que sirva para fabricar explosivos", ha destacado.

Tras reclamar a ETA su disolución incondicional, el ministro del Interior ha dejado claro que el Estado "no está en tregua" y que las Fuerzas de Seguridad con ayuda de Francia seguirán trabajando como hasta ahora.

Preguntado por las diferencias de opinión con el consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, que no cree que los dos últimos detenidos estuvieran reclutando nuevos militantes para cometer atentados, Fernández Díaz ha reconocido que ambos pueden tener "fuentes de información distintas" que les lleven a tener "diferencias de matiz".

"ETA, como organización está derrotada, eso no es incompatible con que haya un numero de militantes que sigan en la clandestinidad, armados, conduciendo coches robados y con material con el que se pueden fabricar explosivos", ha subrayado.

Tampoco da importancia Fernández Díaz a la posición jerárquica de Gurruchaga, situado por el Ministerio del Interior en la cúpula del 'aparato militar' de la banda, toda vez que la organización está "muy diezmada" y su estructura es "muy débil".

"El escalafón tiene una importancia relativa", ha dicho.

Por su parte, el ministro del Interior de Francia, Manuel Valls, ha garantizado que su Gobierno no modificará su política contra la banda terrorista hasta que ésta no se disuelva incondicionalmente y se produzca su desarme total.

Valls, que ha mezclado español y francés en su comparecencia ante los medios, ha subrayado que la posición de Francia es la posición de España y que la disolución y desarme de ETA están fuera de toda discusión.

Tampoco, habrá cambios, ha garantizado, en la política penitenciaria que se aplica a los reclusos de ETA internados en cárceles del país vecino.