La Reina ha conocido en la sede central de la Cruz Roja en Madrid el corazón operativo de esta organización humanitaria, con cuyos responsables ha mantenido una reunión de trabajo, así como con empleados y voluntarios a los que ha podido saludar personalmente durante una visita por sus instalaciones.
La secretaria de Estado de Igualdad, Susana Camarero, y el nuevo presidente de Cruz Roja en España, Javier Senent, han recibido a doña Letizia a las puertas del inmueble desde el que se coordinan las labores de asistencia que lleva a cabo la entidad, no sólo en España, sino también en el extranjero.
El último despliegue puesto en marcha desde aquí ha sido el motivado por la catástrofe aérea del avión A320 de la compañía Germanwings en los Alpes franceses, en el que perecieron sus 150 ocupantes, 50 de ellos españoles a cuyos familiares han prestado ayuda psicológica sobre el terreno ocho equipos de especialistas.
Además de recibir información sobre la labor desempeñada por Cruz Roja gracias a sus más de 200.000 voluntarios, la Reina ha visitado los diferentes departamentos desde los que se organiza su trabajo.
En el de Cooperación Internacional ha podido conversar con el personal implicado en el despliegue español de Cruz Roja en Sierra Leona, donde mantiene un importante equipo sanitario en un hospital dedicado a combatir la epidemia de ébola en este país africano.
Poco antes de que doña Letizia pasara por esta sala se celebraba una reunión de trabajo a través de videoconferencia con dos de los españoles desplazados a este país, la enfermera Lucía Benavent y su compañero Álvaro Carmona, quienes conversaban con los responsables en Madrid de esta importante operación sanitaria internacional.
La Reina ha permanecido unas dos horas en la sede, dedicadas a conocer todos los departamentos de Cruz Roja Española, como Intervención Social -últimamente muy volcado en un plan de empleo para tratar de combatir la exclusión social de los parados- Juventud, Voluntariado, Formación, Estudios e Innovación.
El más dinámico, donde ha visto en acción a los teleoperadores de la ONG, es el Centro de Coordinación, que funciona todos los días ininterrumpidamente durante 24 horas, y cuya actividad se hace frenética en caso de catástrofe o cuando es preciso atender una gran emergencia, dentro o fuera de España. Son casi 200 las personas que trabajan en la sede de Cruz Roja, la mitad voluntarios y la otra mitad contratados.
En su primera visita como Reina a la Cruz Roja, además de poner rostro a una pequeña parte de los muchos españoles vinculados a esta organización, doña Letizia se ha informado de sus líneas prioritarias de actividad, aprobadas en su última Asamblea General del mes de marzo, en la que Javier Senent fue elegido presidente.
En los próximos cuatro años, la institución humanitaria apuesta por responder a las situaciones de vulnerabilidad, mantener su compromiso con la sociedad y adaptarse a las necesidades de las personas. Cruz Roja Española cumplió su 150 aniversario en 2014, ya que fue fundada en 1964, un año después del nacimiento de Cruz Roja internacional.
Fue en la conmemoración de este aniversario, el pasado 4 de julio, cuando doña Letizia pronunció su primer discurso como Reina. "Gracias por ayudar a ciegas, pero mirando a los ojos a cualquier ser humano, al que lo necesite, sin fijarse en banderas, en patrias, en la piel, sin preguntar, sin juzgar", dijo entonces al reconocer su "admirable" compromiso "con la defensa de la dignidad de las personas, en todas sus formas y en cualquier lugar de nuestro mundo".
La implicación de la Familia Real con la Cruz Roja es tradicional desde hace muchos años, y si antes de la abdicación de Juan Carlos I era la Reina Sofía quien se encargaba de presidir los principales actos de la organización, doña Letizia ha recogido ahora el testigo.
