Excarcelada la etarra Josefa Ernaga, condenada por el atentado de Hipercor

  • Ernaga ha abandonado esta mañana la prisión de Jaén en aplicación de la doctrina Parot
  • Fue sentenciada en 1989 a 794 años de cárcel, por la muerte de 21 personas y las heridas de otros 100
La etarra Josefa Ernaga
La etarra Josefa Ernaga |Telemadrid

La etarra Josefa Ernaga, condenada a penas que suman más de 900 años por varios atentados, entre ellos el de Hipercor, ha salido hoy de la prisión de Jaén tras cumplir 27 años y medio de condena y como consecuencia de la anulación de la doctrina Parot.

Ernaga ha abandonado esta mañana la prisión de Jaén después de que la Audiencia Nacional acordara para hoy su excarcelación cuando, hace algo más de un año, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) anuló la llamada doctrina Parot que permitía el alargamiento de la estancia en la cárcel de los etarras.

En aplicación de la doctrina Parot, Ernaga debía haber salido de prisión el 27 de agosto de 2017, pero con su derogación la libertad de la etarra se ha adelantado casi tres años y hoy se ha dado por cumplida su condena.

Ernaga fue sentenciada en 1989, junto a otros miembros del comando Barcelona de ETA, a 794 años de cárcel por su participación en el atentado contra el centro comercial Hipercor de Barcelona, cometido el 18 de junio de 1987, en el que murieron 21 personas y resultaron heridas otras cuarenta.

Además, en 1991 la Audiencia Nacional le impuso otros 142 años por un atentado perpetrado en 1987 en el puerto de esa ciudad en el que falleció un guardia civil.

La etarra, nacida en 1951 en la localidad navarra de Merkiritz, se vinculó en 1981 con el comando Nafarroa de ETA y supuestamente participó en varios atentados de ese grupo.

En 1982 huyó de su domicilio tras la detención de Mikel Salvador, junto a quien supuestamente había participado en un atentado el 16 de abril.

Ernaga permaneció en Francia hasta diciembre de 1985, cuando la dirección de la banda le encargó preparar la infraestructura del comando Barcelona.

La primera acción que se atribuye a este comando es la explosión de un coche bomba el 13 de septiembre de 1986 al paso de un microbús de la Guardia Civil en el barrio barcelonés de Poble Nou, que causó heridos leves.

La colocación de un vehículo similar frente al Cuartel de la Policía Nacional en la plaza de España, en el que murió un policía y hubo doce heridos el 14 de octubre, y de una bomba en un concesionario de Renault, que causó heridos leves el 11 de diciembre, son otros atentados del grupo ese año en Barcelona.

También se le responsabiliza de un coche bomba frente al puesto de la Guardia Civil en el puerto que mató a un policía e hirió a 17 personas el 27 de marzo de 1987, y de otro contra un vehículo de la Guardia Civil que el 2 de abril causó la muerte a un joven.

El 12 de junio una bomba colocada por el comando Barcelona ocasionó daños por 3.000 millones de pesetas en la empresa Empetrol, en Tarragona.

Una semana después el comando Barcelona ejecutó el atentado más sanguinario de la historia la banda: la explosión de un coche bomba con veinte kilos de amosal en el aparcamiento del supermercado Hipercor de Barcelona, con 21 muertos y 32 heridos.

Ernaga esperó tras el atentado en un piso alquilado de Barcelona a Domingo Troitiño y Caride Simón, los miembros del comando que colocaron el vehículo.

El 5 de septiembre de 1987 la Policía desarticuló el comando con la detención en un piso de la calle Mallorca de Barcelona de Troitiño, José Luis Gallastegui Lagar y Ernaga, que resultó herida en la operación.

La sentencia más dura contra Ernaga fue dictada por la Audiencia Nacional el 29 de octubre de 1989 en el juicio por este atentado: 794 años de cárcel por 21 delitos de asesinato, 32 de lesiones, 13 faltas de lesiones y un delito de estragos, así como a una indemnización de mil millones de pesetas.