El PSOE plantea su presupuesto alternativo con 8.000 millones más de gasto

  • Se lograría en la lucha contra el fraude y seis mil millones por subidas de impuestos a las rentas altas y los grupos empresariales

El PSOE ha presentado este miércoles su presupuesto alternativo en el que proponen, de partida, 8.000 millones de euros más de gasto, que el que contempla el proyecto del Gobierno. Según Pedro Sánchez, esa cantidad se lograría con tres factores: Ahorro público con mayor eficacia en el gasto, mayores ingresos en la lucha contra el fraude y seis mil millones por subidas de impuestos a a la rentas altas y los grupos empresariales.

El PSOE ha planteado hoy un presupuesto alternativo al que ha presentado el Gobierno para 2018, que supone un aumento del gasto de 8.000 millones de euros, siempre que se consigan ahorrar 2.500 millones en gasto público, y que incluye partidas a favor de la política de empleo.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha presentado hoy el documento "Hagamos un país mejor", aprobado por la Ejecutiva del partido y que será la base de la enmienda a la totalidad que presentará el grupo parlamentario socialista el 20 de abril.

SUBIDA DE IMPUESTOS, IRPF Y SOCIEDADES

La propuesta socialista contempla la subida del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) hasta el 26,5 % para rentas de 150.000 euros y un tipo del 30 % para los contribuyentes que obtienen más de 50.000 euros de base de ahorro y unas rentas superiores a 150.000 euros, con lo que la recaudación aumentaría en 400 millones y en 1.500 millones, respectivamente.

También, el alza del tipo mínimo de Sociedades al 15 % para las grandes corporaciones, así como un nuevo impuesto a la banca del 8 % y otro sobre beneficios desviados para evitar la evasión fiscal. La modificación del Impuesto de Sociedades también conllevaría la revisión de exenciones y desgravaciones, y representaría una subida de la recaudación de unos 4.000 millones de euros.

Asimismo, proponen equiparar los tipos impositivos que soportan el gasóleo de automoción y la gasolina, sin afectar al gasóleo bonificado para los transportistas y agricultores, con el fin de recaudar unos 600 millones de euros anuales, que serían cerca de 2.140 millones en tres años y medio.

6.500 MILLOES POR LA SUBIDA DE IMPUESTOS

En total, el PSOE plantea unos ingresos tributarios adicionales de unos 6.500 millones de euros, a los que habría que sumar otros 1.500 millones procedentes de la lucha contra el fraude. De esta forma se vería compensado el gasto adicional de 8.000 millones que propone el PSOE y que incluye partidas por valor de 4.500 millones de euros en favor de políticas de empleo y de formación y de protección social.

En este sentido, los socialistas insisten en un Ingreso Mínimo Vital que iría dirigido a rentas de entre 7.100 euros y 17.238 euros anuales y que irían vinculadas a prestaciones de entre 600 euros y 1.800 euros. El Ingreso Mínimo Vital supondría un gasto de 2.400 millones de euros y se sumaría a medidas en políticas activas de empleo, por valor adicional de 1.100 millones, y a un gasto en protección por desempleo de 1.200 millones más, ya que piden recuperar el subsidio para desempleados mayores de 52 años y parados de larga duración, que beneficiaría actualmente a 2 millones de personas.

Otras medidas de gasto se refieren a incrementar la dotación para Educación en 986,4 millones, en I+D (801 millones), para el Ministerio de Industria, Turismo y Agenda Digital (en 832 millones) y para Dependencia y Servicios Sociales (715,2 millones). La propuesta del PSOE destina a medidas de igualdad de género 595 millones adicionales, 474 millones para la creación de 106.000 nuevas plazas para educación infantil de 0 a 3 años, 290 millones para equipar los permisos de paternidad y maternidad a 6 semanas obligatorias, y 101 millones a una prestación no contributiva de maternidad de 6 semanas de duración.

Sánchez ha destacado también la importancia de invertir en vivienda y en cooperación en desarrollo, y ha puntualizado que el presupuesto socialista propone la creación de un parque público de vivienda al alquiler, con 20.000 viviendas nuevas en 4 años y 32.000 rehabilitadas.