El juez de la Mata procesa a Cotino y 23 personas más por visita del papa a Valencia

Juan Cotino
Juan Cotino |Telemadrid

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha procesado a 24 personas, entre ellos el expresidente de las Cortes valencianas Juan Cotino, por la comisión de al menos ocho delitos en la contratación de las pantallas y megafonía con motivo de la visita del Papa a Valencia en 2006.

Además de Cotino, entre los imputados a los que De la Mata procesa por asociación ilícita, prevaricación, blanqueo y delito fiscal, figuran el exdirector de la televisión pública valenciana (RTVV) Pedro García Gimeno y varios de sus altos cargos, así como los responsables del entramado de empresas de Gürtel, el llamado grupo Correa: Francisco Correa, Pablo Crespo, Álvaro Pérez el Bigotes y José Ramón Blanco Balín.

El magistrado ha adoptado esta decisión en un auto de 79 folios en el que acuerda transformar estas diligencias previas en procedimiento abreviado (el equivalente al procesamiento en un sumario), por lo que ahora corresponderá a la Fiscalía y al resto de las acusaciones presentar sus escritos solicitando la apertura de juicio oral y las penas que reclaman.

Según relata el juez en su resolución, el entramado empresarial de Correa aprovechó la visita del papa, en junio de 2006, para lograr la adjudicación de forma ilícita de contratos públicos, apoderándose de fondos públicos para su enriquecimiento personal.

Los hechos se acotan a la contratación de alquiler de pantallas, mantenimiento y megafonía, cuyo coste, 7 millones de euros, supuestamente fue fijado por los imputados, quienes decidieron que lo asumiera el ente público RTVV, que a su vez lo adjudicaría a través de Teconsa, empresa pantalla del grupo Correa.

No obstante, De la Mata ha acordado abrir una nueva pieza separada en relación con este asunto con el objeto de ampliar la investigación sobre las operaciones y los posibles delitos cometidos en las contrataciones por parte de la Fundación de la Comunidad Valenciana V Encuentro Mundial de las Familias con motivo de la visita del pontífice Benedicto XVI.

De hecho, el juez señala a Juan Cotino como "factótum" y "elemento nuclear" de esa Fundación como responsable último de sus contratos, "manejando desde atrás" las contrataciones en común acuerdo con el entonces director de RTVV.

Cotino, prosigue el auto, "consiguió su propósito de que se adjudicaran al grupo Correa los servicios mencionados" de imagen y megafonía, usando los fondos públicos de RTVV para hacer el pago, permitiendo a García Gimeno aprobarlo con un amplio sobrecoste, con el que se enriquecieron personalmente los miembros del grupo.

Ese convenio entre la Fundación y la televisión valenciana supuso un desembolso ilícito de 7.493.600 euros, un precio "desorbitado y notoriamente superior al del servicio realmente prestado", según el juez, que cifra en 3.300.000 euros los fondos sustraídos de RTVV.

Por ello, De la Mata procede contra los funcionarios que formalizaron el convenio y contra los que posteriormente participaron en la mesa de contratación que terminó adjudicando a Teconsa ( pantalla del grupo de Correa) el contrato sin publicidad y tramitado por urgencia.

El juez relata cómo Teconsa, empresa constructora que no tenía experiencia alguna en organizar eventos, terminó subcontratando a tres empresas que finalmente colocaron las pantallas por un valor de 2.994.200 euros

El magistrado detalla la apropiación y reparto de los fondos sustraídos, que alcanzan los 3.387.197 euros repartidos supuestamente entre Correa, Crespo, Álvaro Pérez (500.000), Blanco Balín (249.000) y el propio director de RTVV, García Gimeno (500.000).

Correa y Crespo se beneficiaron en 957.305 euros a los que se añadieron otros 230.000 destinados a financiar una operación inmobiliaria en el municipio alicantino de la Nucía. El juez cifra así en casi un millón de euros los pagos a proveedores de las obras en la casa que Correa tenía en Ibiza.

La rama valenciana de Gürtel está dividida en seis piezas, de las que cinco fueron remitidas a la Audiencia Nacional después de que los aforados perdieran esta condición en las últimas elecciones.