El Gobierno se plantea la necesidad de vetar la tramitación de las enmiendas parciales al proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado para 2011 que presentarán PP, ERC, IU, ICV, BNG y UPyD, previsiblemente con el respaldo de Nafarroa Bai y UPN, para que se derogue la congelación de las pensiones en el próximo año, según han indicado fuentes parlamentarias. El Reglamento del Congreso faculta al Gobierno a impedir que se voten enmiendas a los Presupuestos que supongan un incremento de gasto o una disminución de ingresos, una opción a la que ya se acogió en el debate presupuestario de hace un año para evitar que la oposición le 'tumbara' la subida del IVA que ha entrado en vigor en julio.
Recurrir a esta potestad legal, utilizada también para frenar varias proposiciones de ley presentadas por PP, CiU y ERC contra la congelación de pensiones, es una de las posibilidades que maneja el Gobierno, aunque no la única.
La otra opción sería cerrar un acuerdo presupuestario con el PNV y Coalición Canaria con el que estas formaciones se comprometan a votar en contra de las enmiendas, si bien esto conllevaría el riesgo de ajustadas votaciones tanto en la Comisión de Presupuestos como en el Pleno del Congreso.
SOLO PUEDE ASPIRAR AL EMPATE.
Esto es así porque la portavocía de presupuestos y los votos en la Comisión del Grupo Mixto, en el que se integra Coalición Canaria, la asume el BNG, lo que llevaría a que, de votarse estas enmiendas, se produjera un empate entre el PSOE y el PNV y el resto de grupos.
Aunque esta situación beneficia en principio al Gobierno, ya que si no se salva un empate pese a repetir las votaciones, las enmiendas decaen, los socialistas no quieren llegar a esta situación, que se volvería a producir cuando las enmiendas volvieran a votarse ante el Pleno de la Cámara Baja.
Conscientes de esta posibilidad, tanto el PP como el grupo de ERC, IU e ICV, ya han exigido al Gobierno que no vete sus enmiendas. En este sentido, el diputado de ERC, Joan Ridao, ha augurado que una decisión de este calibre podría tener consecuencias incluso en la calle, habida cuenta de que la congelación de las pensiones fue una de las razones de la huelga general del pasado 29 de septiembre.
En este sentido, el diputado de IU, Gaspar Llamazares, ha asegurado que está dispuesto a votar, además de las suyas, las enmiendas de cualquier otro grupo que pida la derogación de la medida, y espera que el PP esté dispuesto a hacer lo mismo.
También ha recordado que para pedir que se retire la medida de los Presupuestos, los grupos deben presentar alternativas para igualar el ahorro de 1.500 millones de euros que el Gobierno espera anotarse con la congelación de las pensiones.
EL PNV CUMPLIRA SU PARTE, SI HAY ACUERDO.
Por su parte, el PNV, aunque se declara en contra de la medida, está dispuesto a respetar su acuerdo presupuestario, si éste finalmente se alcanza antes del límite de las 14.00 horas de mañana, plazo para presentar las enmiendas a la totalidad.
Fuentes de la formación nacionalista han señalado a Europa Press que tampoco van a fijar posición sobre las enmiendas parciales del resto de grupos cuando éstas no se van a registrar hasta el próximo 15 de octubre.
