Cadena humana entre Durango y Pamplona por el derecho a decidir

  • La Presidenta de Navarra la califica de "montaje propagandístico"
Cadena humana entre Durango y Pamplona
Completada la cadena humana entre Durango y Pamplona por el derecho a decidir |Archivo

La cadena humana organizada para reivindicar el derecho a decidir de los vascos ha conseguido unir este mediodía los 123 kilómetros que hay entre Durango, en Vizcaya, y Pamplona con más de 100.000 personas.

El colectivo Gure Esku Dago (Está en nuestra mano), organizador de esta iniciativa, ha confirmado a Efe que la cadena se ha completado y que el número de asistentes ha superado con creces sus expectativas.

La cadena humana ha quedado formada hasta las 12:30 horas y los organizadores de la iniciativa ofrecerán más tarde datos concretos sobre cómo ha transcurrido y harán una reflexión sobre este acto.

Más de 900 autobuses han partido desde diferentes municipios vascos y navarros para acercar a las personas inscritas en la iniciativa a los respectivos puntos kilométricos que les habían asignado para completar el recorrido.

Así, desde las 10:00 horas los asistentes han ido ubicándose respetando las indicaciones que se habían pintado en la calzada y la cadena humana ha ido tomando forma, en una mañana soleada y con temperaturas veraniegas.

Ha sido necesario redistribuir a algunos participantes para llenar algunos huecos que se habían creado, mientras la cadena humana contaba con varias filas de personas que se situaban en otros puntos.

En un ambiente festivo, los eslabones de la cadena ataviados con camisetas diseñadas por Gure Esku Dago y portando numerosas ikurriñas, han aguardado en sus puestos por la reivindicación "Somos una nación, tenemos derecho a decidir, es el momento de la ciudadanía".

CON REPRESENTANTES DE PNV, EZKER BATUA, PODEMOS, BILDU, ERC Y PSOE

Durante la cadena, se han escuchado gritos a favor de la independencia, y han unido sus manos por el derecho a decidir representantes de partidos de la coalición Bildu, como Hasier Arraiz (Sortu) y Pello Urizar(EA), diputados como Sabino Cuadra y Xabier Mikel Errekondo, entre otros.

Por parte del PNV ha estado su presidente, Andoni Ortuzar, que se ha situado en el alto de Kanpazar, y los guipuzcoanos Joseba Egibar y Marker Olano, en Ataun, así como el senador Iñaki Anasagasti.

También han participado el coordinador de Aralar, Patxi Zabaleta, representantes de Podemos y Ezker Batua-Berdeak, además de catalanes que ya participaron en 2013 en una cadena humana que se desarrolló con motivo de la Diada, como el portavoz de ERC, Joan Tardá, que ha estado en Pamplona.

Se han sumado el ex lehendakari Carlos Garaikoetxea, el dirigente del PSC José Luis Uriz, y diversos dirigentes críticos con la actual dirección de los socialistas navarros.

La reivindicación ha contado con la exconsejera socialista Gemma Zabaleta, los secretarios generales de los sindicatos ELA y LAB, Adolfo Muñoz "Txiki" y Ainhoa Etxaide, respectivamente, y una de las responsables de CCOO de Euskadi, Garbiñe Espejo.

Asimismo, estaban el escritor que fue Premio Nacional de Narrativa 2009 Kirmen Uribe y el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre.

BARCINA CALIFICA LA CADENA HUMANA DE "MONTAJE PROPAGANDÍSTICO"

La presidenta de Navarra y de UPN, Yolanda Barcina, ha calificado la cadena humana que ha unido a través de 123 kilómetros Pamplona con Durango, en Vizcaya, de "montaje propagandístico, que no tiene nada de espontáneo o de libertad".

"Por mucho que nos sonrían los que han iniciado esa cadena, los primeros que han empezado a proponerla son los que callaron o justificaron asesinatos como el de Tomás Caballero o José Javier Múgica (ediles de UPN asesinados por ETA)", ha afirmado Barcina en su intervención en la asamblea general de su partido.

Tras remarcar que siempre defenderán la memoria de todas las víctimas del terrorismo, ha asegurado que nunca irán con "aquellos que callaron o guardaron silencio".

El proyecto de quienes han impulsado la cadena humana, a los que luego se han ido sumando otros, es, según Barcina, "un proyecto totalitario, de coacción, de propaganda, de nacionalismo obligatorio, que pretende imponer a la mayoría de los navarros lo que piensa una minoría".