Una marcha de "indignados" exige por Valencia la libertad de los 5 detenidos

  • "Acampada Valencia" niega que los "indignados" hayan agredido a los policías
  • Los sindicatos policiales defienden la carga y dicen que les lanzaron botellas y tijeras

Una marcha de "indignados" se ha desplazado esta tarde desde el centro comercial de la ciudad de Valencia hasta la comisaría de Zapadores, donde sus organizadores han anunciado que esperarán hasta que los cinco compañeros detenidos junto a Les Corts terminen de prestar declaración ante el juez en la Ciudad de la Justicia.

Varios centenares de personas, unas 7.000 según los organizadores, protagonizan este masivo acto de protesta por la intervención policial de este mediodía y los cinco detenidos por supuestos delitos de atentado, lesiones y desórdenes públicos, que a última hora de la tarde iban a pasar a disposición judicial.

El primer acto de la posterior marcha ha tenido lugar frente a la sede de la Delegación del Gobierno, en la céntrica calle de Colón, donde una sentada ha obligado a cortar el tráfico mientras los concentrados coreaban gritos a favor de los detenidos.

Un portavoz ha informado entonces de la necesidad de volver a Zapadores "a recoger a los compañeros", para lo cual han negociado con la Policía Local para ir en marcha pacífica por el centro de la calzada hasta la comisaría a través de la calle de Ruzafa, todo ello bajo la escolta y vigilancia de agentes del Cuerpo Nacional de Policía.

Los incidentes se saldan con 18 heridos y 5 detenidos

Los incidentes ocurridos en las calles anexas a Les Corts Valencianas han concluido con un saldo de al menos dieciocho heridos, ocho de ellos policías, y cinco detenidos entre el grupo de seguidores del movimiento 15-M, que ha reunido a centenares de personas frente a esta sede parlamentaria.

La Cámara autonómica celebraba hoy la sesión constitutiva de su octava legislatura, ante lo cual el citado colectivo inició anoche una concentración en la calle de Navellos, la vía peatonal que conduce a la entrada principal de este edificio institucional.

Sobre las siete de la mañana, según ha contado un portavoz del movimiento, la Policía ha desalojado "pacíficamente" a las decenas de jóvenes que han dormido al raso y seguidamente ha establecido un perímetro de seguridad colocando vallas en todas las calles anexas al Palau.

Los seguidores relacionados con el movimiento, que aumentaban según avanzaba la mañana, se han distribuido por diferentes puntos del perímetro, y sobre las nueve se ha registrado el primer incidente.

Una joven se ha negado a moverse de su sitio cuando la Policía trababa de abrir un pasillo para que los funcionarios y diputados accedieran al Parlamento, por lo que finalmente ha sido arrestada por desobediencia y alteración del orden público.

La protesta ha transcurrido sin altercados hasta el mediodía aunque la tensión ha sido alta, especialmente entre los agentes antidisturbios y algunos jóvenes radicales que el movimiento no reconoce como seguidores.

Sin embargo, cerca de las 13.00 horas, ha ocurrido el incidente que ha dado lugar al enfrentamiento: tres agentes han traspasado una de las vallas para denunciar a una joven que les estaba insultando y algunos de sus compañeros han tratado de impedirlo, según ha relatado el subdelegado del Gobierno en Valencia, Luis Felipe Martínez.

La situación ha dado lugar a una intervención policial en la que algunos activistas han sido golpeados y reducidos por los agentes, que también han recibido puñetazos y el lanzamiento de objetos.

Fuentes del movimiento 15-M aseguran que diez de sus seguidores han sufrido heridas de diversa consideración, entre ellos una mujer de 55 años que ha sido trasladada al Hospital Clínico con contusiones en la cara y en la cabeza, según han indicado fuentes del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

Asimismo, el CICU informa de tres personas más atendidas en el lugar de los hechos por contusiones leves (una joven de 28 años y dos hombres de 41 y 43).

Entre los agentes ha habido ocho heridos leves, uno de ellos por el impacto de unas tijeras en la cara, según ha dicho el subdelegado del Gobierno, quien ha informado de la detención de cuatro jóvenes durante esta intervención.

El diputado de Compromís Juan Ponce, que se encontraba detrás de la valla, ha sufrido un pequeño golpe en su brazo derecho propinado, al parecer, por la porra de un policía.

Después del enfrentamiento, la tensión ha continuado durante la salida de los diputados e invitados, al finalizar el ágape posterior a la sesión constitutiva.

Algunos de ellos, como el expresident de la Generalitat Joan Lerma, han sido fuertemente increpados durante el trayecto hacia sus coches y han requerido protección policial.

Finalmente, sobre las 14.30 horas, coincidiendo con la conclusión de los actos institucionales y festivos programados, los "indignados" se han disgregado y la Policía ha levantado el cerco de seguridad.

Ante lo sucedido, la coordinadora y portavoz parlamentaria de EU, Marga Sanz, ha pedido la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ana Botella, al considerar que la intervención policial ha sido "injustificada".

LOS POLICÍAS DEFIENDEN LA CARGA DE VALENCIA Y ACUSAN A LOS "INDIGNADOS" DE LANZARLES TIJERAS

Los dos principales sindicatos de la Policía Nacional, SUP y CEP, defendieron hoy la actuación de sus compañeros frente a las Cortes valencinas, donde este jueves trataron de entrar a la fuerza decenas de los llamados "indignados". Estos dos sindicatos policiales acusaron a estos manifestantes de lanzar botellas y tijeras a los agentes.

En concreto, José María Benito, portavoz del SUP, dijo a Servimedia que la actuación de los "indignados" de Valencia no ha tenido "nada que ver" con la protesta de este miércoles en Madrid junto al Congreso de los Diputados. Según este representante policial, los manifestantes de la capital de España se comportaron "de manera pacífica".

Frente a esto, Benito sostuvo que los concentrados junto a las Cortes valencianas trataron de "romper el cordón policial" para entrar en el Parlamento autonómico. Este portavoz sostuvo que estos "indignados" arrojaron botellas y tijeras a los policías, objetos que han sido incautados.

Por su parte, Lorenzo Nebreda, portavoz de la CEP, sostuvo que sus compañeros de Valencia le han transmitido que "la carga ha sido proporcionda", ya que los manifestantes rebasaron a la fuerza el cordón policial para tratar de entrar en las Cortes autonómicas.

Según Nebreda, los congregados lanzaron todo tipo de objetos a los agentes, entre ellos unas tijeras, que impactaron en la barbilla de uno de los policías. Este representante de la CEP destacó que varios de sus compañeros han resultado heridos.

Además, este representante policial destacó que una mayoría de las personas que se congregó frente a las Cortes valencianas eran "antisistema" de esta comunidad autónoma, que son conocidos por las Fuerzas de Seguridad.

"ACAMPADA VALENCIA" NIEGA AGRESIONES A LOS POLICIAS

Por su parte, la organización de "Acampada Valencia" ha desmentido que integrantes del "Movimiento 15-M" hayan agredido a agentes del Cuerpo Nacional de Policía durante los incidentes. En un comunicado, el movimiento que lidera la acampada de "indignados" en la plaza del Ayuntamiento de Valencia ha manifestado su "total desprecio" a las medidas tomadas por la Policía.

Según han denunciado, los agentes han vulnerado su derecho a la libre circulación por vías públicas, en concreto en todas las calles que rodean el Palau de Les Corts.

También han asegurado que los policías "han discriminado a los manifestantes por razones de ideología y vestimenta" pues decidían, "arbitrariamente" a su juicio, quién podía cruzar el cordón policial.

Del mismo modo, sostienen que han vulnerado su derecho a la libertad de expresión al "limitar las palabras de los manifestantes, increpar a los que expresaban su desprecio al corrupto sistema político actual e incluso llegar al uso de violencia explícita e indiscriminada".