Los díscolos del PSOE alegan que votar en conciencia era un derecho innegable

  • Iceta llamará a Javier Fernández para reunirse y defenderá un "tratamiento específico" para el PSC
  • Rechaza que se crea "que el PSC se desentiende de España y que el PSOE se desentiende de Cataluña"

Los diputados díscolos del PSOE, los que votaron NO a Rajoy en su investidura han presentado hoy sus alegaciones para evitar que el grupo socialista en el Congreso les impongan sanciones, que podrían llegar a los 600 euros. Alegan que votaron en conciencia y se ven respaldados por la Constitución. En el partido sigue la división en cuanto al momento en el que hay que celebrar el Congreso que defina el futuro del PSOE y la persona que lo dirigirán.

Los ocho diputados del PSOE que rompieron la disciplina de grupo en la investidura de Rajoy consideran que su voto "en conciencia" ese día era un "derecho innegable" que tenían en virtud de su reglamento interno y que les asiste la Constitución, según las alegaciones que han presentado al expediente sancionador.

Los ocho díscolos -Susana Sumelzo, Margarita Robles, Zaida Cantera, Odón Elorza, Rocío de Frutos, Luz Martínez Seijo, Pere Joan Pons y Sofía Hernanz- han enviado hoy el mismo escrito de alegaciones al presidente del Comité de Disciplina, Luis Carlos Sauquillo.

En él sitúan su voto en conciencia en un "marco de excepción" y aluden al artículo 67.2 de la Constitución Española, que recoge expresamente que "no hay un mandato imperativo para ningún diputado".

No obstante, el portavoz y presidente del grupo, Antonio Hernando, ya advirtió a todos los diputados que el voto en conciencia no procedía en un caso como éste, en el que había una posición establecida por el Comité Federal y por tanto no correspondía al grupo parlamentario decidir el sentido de la misma y si era susceptible a permitir libertad de voto por razones de conciencia.

Las sanciones económicas del grupo parlamentario afectarían a todos los diputados por igual. Las que podría aprobar a mayores un Comité Federal, como la expulsión del grupo o incluso la suspensión de militancia del PSOE, no abarcarían ni a los diputados del PSC, por ser un partido autónomo, ni a las dos independientes, que no pertenecen propiamente a la formación.

ICETA LLAMARA A FERNANDEZ

Por su parte, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado este lunes que llamará en las próximas horas al presidente de la Comisión Gestora del PSOE, Javier Fernández, para reunirse con él cuanto antes y defenderá un "tratamiento específico" para el PSC.

En una entrevista de TV3 recogida por Europa Press, ha reivindicado que debe entenderse que el PSC no podía asumir la disciplina de voto del PSOE para facilitar la investidura de Mariano Rajoy porque a él le atribuye buena parte del bloqueo de relaciones entre la Generalitat y el Estado: "Es muy importante que en el PSOE haya plena conciencia de que la situación catalana requiere reconocer alguna excepción, como con la votación a Rajoy".

Iceta ha defendido que se mantenga la hermandad entre el PSC y el PSOE pese a esta discrepancia: "No me gustaría que se entendiera que el PSC se desentiende de España y que el PSOE se desentiende de Cataluña, sería un grave error".

Ha reivindicado que muchos catalanes quieren "seguir formando parte de España y ser respetados como catalanes", así como sentirse respetados y queridos, y ha destacado que la actual relación entre el PSC y el PSOE ya le parece correcta.

Ahora bien, ha dicho que está abierto al diálogo "ante las voces que dicen que hay que revisar" la relación entre ambos partidos, pero ha subrayado que es un asunto que no se puede decidir unilateralmente y que debe ser abordado en los congresos de los partidos.

español que quiere ser útil.