Los agrocombustibles, lejos de ser "verdes" contaminan más

  • España emitirá 9,5 millones de toneladas adicionales de CO2 cada año por usarlos
  • Las asociaciones ecologistas denuncian que equivale a los gases de hasta cuatro millones de coches

España producirá unos 9,5 millones de toneladas extra de CO2 cada año, lo que equivale al dióxido de carbono generado por un aumento de entre 1,8 y 4,28 millones de coches, por aumentar el uso de agrocombustibels. Se trata de un tipo de carburos de moda entre los gobiernos por ser una supuesta energía "verde", alternativa ecológica a los combustibles fósiles.

Sin embargo, el fuerte aumento de estos combustibles que patrocina el Gobierno español ha puesto en alerta a cuatro asociaciones ecologistas. Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace y SEO/Birdlife han presentado un estudio que aborda los planes de aumento del uso de agrocombustibles en Europa para los próximos 10 años, lo que requerirá el uso de hasta 6,9 millones de hectáreas de nuevo suelo y empeoraría el cambio climático.

Estas cuatro organizaciones llamaron al Gobierno español y a la Comisión Europea a revisar urgentemente los impactos reales de los agrocombustibles en el cambio climático y la soberanía alimentaria, y priorizar la eficiencia energética en el transporte.

Además, indicaron que la nueva legislación debe tener en cuenta la huella total de carbono de los agrocombustibles con la introducción de factores de cambio indirecto del uso del suelo. Esta investigación, encargada por una coalición europea de organizaciones ecologistas y de desarrollo, incluye los impactos debidos al cambio indirecto del uso de la tierra que provocan los agrocombustibles.

El informe concluye que para obtener la materia prima necesaria para cubrir los objetivos de 2020 sería necesario convertir en campos de cultivo y plantaciones una superficie equivalente a 1,5 veces la superficie cultivable de España.

Peligro para los bosques y ecosistemas naturales

Si los países europeos no cambian sus planes para obtener combustibles para el transporte a partir de cultivos alimentarios, se ponen en peligro los bosques y los ecosistemas naturales en muchos países, además de perjudicar la lucha contra el hambre y la injusticia en las comunidades más pobres del planeta.

Según los planes nacionales, cinco países serán responsables de más de dos tercios del incremento de emisiones de CO2: Reino Unido, España, Alemania, Italia y Francia.