Los abertzales encaran el juicio a Otegi presentandolo como un obstáculo para la paz

  • La Audiencia Nacional juzgará desde este lunes a Otegi y otros siete acusados de reconstruir Batasuna a través de Bateragune

La izquierda abertzale ha retomado en los últimos días su aparato de presión de cara al juicio contra los procesados en el 'caso Bateragune' en el que el histórico portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi se juega recuperar la libertad o ser condenado a un máximo de 14 años de prisión acusado de tratar de recomponer la cúpula de la formación ilegalizada siguiendo las órdenes de ETA.

Por ello, sus simpatizantes han enfocado esta campaña mediática para presentar el juicio como un obstáculo para la paz.

El objetivo de esta ofensiva mediática ha sido ejercer la máxima presión a través de los medios de comunicación, las redes sociales o el ámbito internacional para influir a favor de la absolución del dirigente independentista, quien previsiblemente recobraría la libertad en caso de ser absuelto en esta causa en la que se le acusa de tratar de recomponer la cúpula de Batasuna siguiendo las órdenes de ETA.

Uno de los actuales portavoces de Batasuna, Txelui Moreno, fue el primero en manifestar hace dos semanas su esperanza de que "la respuesta de la sociedad vasca y a nivel internacional" al juicio de Bateragune lleve a la absolución de los procesados. A partir de ahí se sucedieron las iniciativas y pronunciamientos, incluyendo los agentes internacionales ligados históricamente a la izquierda abertzale.

Desde Irlanda, el Sinn Féin, ex brazo político de los terroristas del IRA, solicitó al Gobierno que libere al portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi como muestra de "coraje" y "confianza". En una carta firmada, entre otros, por el líder de la formación, Gerry Adams, consideran que la absolución de Otegi puede "desempeñar un papel constructivo en el fin de uno de los conflictos más antiguos de Europa".

En la misma línea, según anunció Batasuna el pasado viernes, un total de 110 sindicatos de todo el mundo han exigido la absolución y la puesta en libertad del ex secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, también imputado en esta causa, así como el resto de los acusados.

OTEGI: "BATALLA POLÍTICO JUDICIAL"

Precisamente, tanto Usabiaga como Otegi han reaparecido en los últimos días para dar su opinión acerca del juicio que les volverá a sentar en el banquillo de la Audiencia Nacional. Por medio de una entrevista concedida desde la cárcel, el histórico portavoz de Batasuna considera que "este juicio traspasa el espacio meramente penal, y se va a convertir probablemente en uno de los últimos escenarios judiciales en donde los diferentes sectores del Estado van a volver a desarrollar una batalla político-judicial similar a la de Sortu y Bildu".

En este sentido, advierte de que "será muy importante cómo la sociedad vasca afronta este juicio". "Nuestras detenciones tenían por objeto abortar el debate y el consiguiente cambio de estrategia de la izquierda abertzale. Construyeron un relato acusador y nos encarcelaron", denuncia.

Por su parte, Usabiaga --en libertad bajo 30.000 euros de fianza desde abril de 2010 para que pudiera cuidar a su madre-- participó en un acto en público donde aseguró que el juicio por Bateragune pretende "sabotear" el futuro "de paz y soluciones". Además aprovecharon para convocar una "gran manifestación" para el próximo día 2 de julio en San Sebastián para reclamar la absolución de los procesados.

GERNIKA: "PRECEDENTE PELIGROSO"

También los firmantes del llamado Acuerdo de Gernika, entre los que se encuentran las formaciones políticas como EA o Alternatiba y varias de las organizaciones e instituciones que han dado lugar a la coalición abertzale Bildu, han hecho su aportación a esta campaña orquestada por Batasuna. Por medio de un comunicado consideraron que el proceso "puede ser un precedente peligroso para el objetivo de la paz y de la normalización política".

El propio Martin Garitano, en su toma de posesión como presidente de la Diputación foral de Guipúzcoa, lució en su solapa una insignia con el número de preso de Otegi (8719600510). Se trata de uno de los símbolos de esta campaña mediática con el que se han hecho hasta camisetas o videos propagandísticos donde amigos, familiares o personas anónimas posaban con esa cifra.

La idea es imitar el uso que los seguidores de Nelson Mandela dieron al número de la celda en la que permaneció buena parte del tiempo. Simpatizantes de la izquierda abertzale han recurrido en numerosas ocasiones a denominar a Otegi como "el Mandela vasco".

BATERAGUNE YA EXISTE EN TWITTER

Actualmente el líder abertzale cuenta con una página web www.arnaldotegi.com donde --en varios idiomas-- se pide el apoyo para Otegi a través de la firma bajo el llamamiento 'Free Arnaldo Askatu'. Esta iniciativa cuenta actualmente con cerca de 4.000 adhesiones.

Por su parte en la popular red social 'Twitter' se creó hace días el 'hashtag' #Bateragune para referirse a todo lo relacionado con el proceso. A través de esta etiqueta se han registrado comentarios denunciando el encarcelamiento de Otegi o se informó de su reciente traslado a una cárcel de Madrid para preparar el juicio.

Pero además de la presión que se pueda ejercer desde fuera, el propio Otegi y el resto de acusados también podrían usar el foco mediático en torno a su figura para lanzar algún mensaje tanto en sus declaraciones ante el tribunal como en los turnos de última palabra de los que dispone todo acusado.

En la cárcel desde finales de 2009, el histórico líder abertzale ha seguido los últimos acontecimientos acaecidos en el País Vasco desde prisión, sin embargo, Otegi no ha sido ajeno a las decisiones de Batasuna. Durante todo este proceso ha seguido cerca los movimientos siendo informado por medio de visitas a prisión desde donde ha concedido incluso algunas entrevistas o publicado varios artículos.