Zapatero dice que el proyecto de ley de las pensiones estará antes de marzo tras las advertencias de Bruselas

  • La Unión Europea exigió una reforma urgente del sistema de pensiones
  • Aseguró que retrasar la edad de jubilación no es suficiente para garantizarlas a partir de 2030

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy que en el primer trimestre de 2011 el Ejecutivo enviará al Congreso de los Diputados su proyecto de ley de reforma de las pensiones.

En un pleno extraordinario en el Congreso sobre empleo, Zapatero dijo que el Gobierno "desearía sentirse acompañado por la mayoría de los grupos" de la Cámara a la hora de afrontar este reto, que "no tiene marcha atrás".

Al respecto, les advirtió a los partidos de que "de cada uno" dependerá la consecución de un pacto que reforzará la "posición como país", algo que, precisó, redundará en beneficio de los futuros pensionistas y que contribuirá al "horizonte de estabilidad" de las cuentas públicas.

Según explicó Zapatero, antes de que el Ejecutivo envíe su proyecto de ley a la Cámara esperará a que la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo haga sus recomendaciones sobre la reforma de pensiones, como se ha hecho desde 1995.

El presidente recordó que el Gobierno, por medio del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha pedido a la comisión que apruebe sus recomendaciones antes de que concluya este año.

A renglón seguido, el Gobierno comenzará a redactar el proyecto de ley y empezará a discutir su contenido con los agentes sociales, añadió el jefe del Ejecutivo.

La Unión Europea ha recomendado ayer a España que tome medidas para asegurar la sostenibilidad de su sistema de pensiones más allá de 2030, y advirtió que no es suficiente con retrasar la edad de jubilación.

El Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) analizó este miércoles un informe sobre la situación de las pensiones en España en el que subraya que el sistema es "sólido actualmente" pero advierte de los riesgos que supone el envejecimiento demográfico y "las presiones añadidas de la crisis".

La UE alerta de la posibilidad de que los desequilibrios empiecen a aparecer en el año 2030. Señala que los riesgos que afronta España debido a varios factores -como que se trata del país con la segunda esperanza de vida más alta del mundo y donde el número de pensionistas se doblará entre 2010 y 2040- "hacen necesario garantizar la sostenibilidad del sistema de Seguridad Social más allá de 2030".

Sobre la reforma, recuerda que a finales de enero el Gobierno presentó un documento de referencia para una reforma "importante" que incluía el aumento de la edad efectiva de jubilación a los 67 años y la prolongación de la vida laboral mediante la desincentivación de la jubilación anticipada.

De la misma forma, apostaba por la consolidación de la relación entre las contribuciones y las prestaciones aumentando el número de años utilizados para establecer las retribuciones base, con el objetivo de no penalizar a aquellos que pierden el empleo al final de su vida laboral y evitar la planificación fiscal.

PEDRO SCHWARTZ: HAY QUE CAMBIAR EL SISTEMA

Por su parte, algunos expertos defienden que para que el sistema sea viable hay que cambiarlo radicalmente.

En el programa de entrevistas de actualidad EL CÍRCULO, Pedro Schwartz, Premio Rey Juan Carlos de Economía, quien sugirió que “todos deberíamos pensar en hacernos un plan de pensiones privado y añadirlo a la pensión futura porque las pensiones son muy bajas y el sistema es muy raro, de hecho, nos quitan los primeros 15 años de contribución, lo que es injusto”. P

“A lo largo del siglo –explicó- el problema se aliviará con la mejora de la productividad, pero una forma de que no quiebre el sistema de pensiones es retrasar el pago o reducirlo. Aplazar la jubilación hasta los 67 es una forma de reducir la pensión, aunque se puede quitar aun más calculando la pensión sobre una base de años distintos. Si somos un país con cabeza e inteligencia, deberíamos cambiar el sistema y que las personas fueran acumulando en una cuenta propia su contribución a la Seguridad Social y que esa sea su pensión, en vez de pagar la de los demás. Esta pensión de reparto se ve que no funciona, no da el incentivo para ahorrar ni para invertir. Se reduce el crecimiento del país”.