Vuelta de tuerca en el pulso de Gobierno y eléctricas por el déficit tarifario heredado

  • Aznar dejó el déficit tarifario en cero en 2004 pero Zapatero lo elevó a los 26.000 millones de euros
  • En el año 97 se aprueba la ley que sienta desde entonces las bases del sector

El gobierno de Mariano Rajoy planta cara a las eléctricas por el tarifazo con el objetivo de frenar la subida de la luz.

Es el último capítulo del pulso que mantienen las cinco grandes eléctricas (desde hace meses) con el actual gobierno (a cuenta del déficit tarifario heredado) que les ha llevado a recurrir incluso ante el Tribunal Supremo decisiones del ejecutivo. Un pulso que ha derivado en una altísima tensión durante este mismo mes.

Desde que el ministro Montoro tumbara en el Senado tres partidas presupuestarias de 3.600 millones previstas para la reforma del sector eléctrico ideada por el ministro Soria. Cifra que supone el déficit tarifario acumulado de este año.

Los presidentes de las cinco grandes eléctricas pidieron reunirse con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y lo hicieron el pasado día 4 (dejando al margen al ministro Soria).

El gobierno les trasladó que estaba dispuesto a sacar de sus balances esos 3.600 millones y convertirlos en deuda pública con dos condiciones: que las eléctricas retiraran los recursos presentados en los tribunales y que renunciaran también a las fortísima subida del recibo de la luz que pretendían y que ya -en aquella reunión- adelantaron al gobierno que estaría en torno al 11 o el 12 %.

Una amenaza que cumplieron en la subasta de esta semana anulada por el ejecutivo.

DÉFICIT TARIFARIO HEREDADO DE ZAPATERO

Se trata de un pulso a cuenta de quién paga el famoso y multimillonario déficit tarifario heredado del gobierno anterior que el ejecutivo de Aznar dejó en cero en 2004 pero que el de Zapatero elevó a los 26.000 millones de euros en apenas siete años por el exponencial incremento de primas a las renovables.

Con un dinero que no era una inversión real en un sector en el que podríamos ser punteros y no una mera subvención que es, al final, lo que fue.

Hemos querido preguntarnos si el sector eléctrico está verdaderamente liberalizado o si su "liberalización" fue tan ficticia como lo fue (en su momento) la de la telefonía (ahora ya completada) o la de los carburantes.

Sectores que más parecen oligopolios, donde la competencia real (que llevaría a la reducción de precios) no existe.