Rubalcaba dice que "Lo que queremos es que nuestras finanzas sean estables y nuestra deuda pagable"

  • Defiende la reforma de la Constitución

El candidato socialista a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha defendido este sábado la reforma de la Constitución pactada con el PP para hacer que las finanzas de España sean "estables" y la deuda "pagable" sin que esto suponga un descenso de la inversión en políticas sociales, lo cual, según ha subrayado, es lo que "diferencia a la izquierda de la derecha".

En un encuentro con colectivos sociales y vecinales de Fuenlabrada (Madrid), en el que ha estado acompañado por el alcalde de la localidad, Manuel Robles, y el secretario general del PSM, Tomás Gómez, Rubalcaba ha remarcado que "endeudarse es muy malo" y por eso considera que es "bueno" que se haya alcanzado un compromiso político para reformar la Constitución y establecer un techo de déficit y deuda para tener "estabilidad presupuestaria".

Así, ha explicado que el acuerdo alcanzado en el Congreso de los Diputados, que estará culminado en las próximas semanas, tiene el objetivo de que los gobiernos sólo se endeuden por lo que puedan pagar, manteniendo así su "autonomía". Lo que queremos es que nuestras finanzas sean estables y nuestra deuda pagable", ha añadido.

Diferencia en cómo gastar el dinero

Rubalcaba se ha comprometido, si gana las elecciones, a que esta reforma no suponga una merma de las políticas sociales, algo que, a su juicio, es lo que diferencia a los partidos de izquierdas de los de derechas. "Nunca he pensado que la diferencia entre izquierda y derecha se dirima en términos de quién se endeuda más, sino que nos distinguimos por cómo nos gastamos el dinero", ha indicado.

Según ha explicado el candidato de los socialistas, "lo que es de izquierdas es endeudarse pudiendo pagar para cosas de interés general, políticas sociales, recaudar impuestos tratando de que paguen más los que más tienen para ir destinado a los que más lo necesitan".

Por todo ello, ha defendido una vez más la reforma constitucional, que ha definido como "importante, necesaria y razonable", ya que ha hecho hincapié en que "no hay nada que hipoteque más a una sociedad que una deuda de lo que no puede pagar".

Reforzar la Confianza

Rubalcaba ha señalado que el acuerdo entre 'populares' y socialistas para la reforma tiene su origen en los acuerdos alcanzados en el Consejo Europeo de julio y en la "incertidumbre financiera" que ha afectado a muchos países de la UE este verano. Así, ha indicado que "los países tienen que demostrar solvencia y adoptar medidas que refuercen la confianza del resto del mundo", por lo que la medida va encaminada a "decir al mundo" que España es un país "en el que se puede confiar".

"Los españoles debemos aprender que uno se puede endeudar, pero hay que hacerlo sabiendo exactamente lo que puedes pagar. Hay que endeudarse en los justos términos porque si no, la cosa no funciona. Cuando un país debe mucho se pierde autonomía política porque se está en manos de los que tienen mucho dinero", ha remachado.

En cualquier caso, Rubalcaba ha subrayado que "la vida sigue" después de la reforma constitucional y que "no genera empleo ni arregla la sanidad o la educación", por lo que ha señalado no hay que olvidar que "hay que hacer muchas otras cosas" de cara a la precampaña electoral, por lo que se ha comprometido una vez más a escuchar la propuestas de los ciudadanos de cara a elaborar su programa para los comicios del 20 de noviembre.

Por su parte, Tomás Gómez ha hecho una referencia velada a las voces discrepantes que han surgido dentro del PSOE por la reforma constitucional y ha afirmado que "la grandeza de un partido no es que todos sus miembros piensen de la misma manera, sino que haya libertad absoluta para debatir".

El líder de los socialistas madrileños, que en su discurso se ha referido a Rubalcaba como "futuro presidente" del Gobierno, ha defendido que esta "libertad interna" es la "esencia del PSOE" y su "seña de identidad", algo que, a su juicio, les hace "más fuertes".

Para Gómez, las próximas elecciones generales suponen un "reto obligado y difícil", y ha advertido de una posible victoria del PP, ya que "si en tiempos de bonanza es malo un gobierno de derechas, no diré nada en tiempos de crisis". "Estamos obligados a ganar", ha remarcado.

Por ello, ha defendido la candidatura de Rubalcaba a la Presidencia del Gobierno por su "sentido de la responsabilidad, que le lleva a querer hacerse cargo de este país" y porque "actúa como un auténtico hombre de Estado". Por último, ha elogiado su "elocuencia", una característica que, en su opinión, también reconoce el propio líder del PP, Mariano Rajoy, "y por eso no quiere debatir con él".